Los tractores del siglo pasado rugieron de orgullo en Silleda

Rocío García Martínez
rocío garcía LALÍN / LA VOZ

PONTEVEDRA

rober amado

Cincuenta vehículos agrícolas restaurados reivindicaron su papel histórico en el progreso del campo

10 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Un ejército de cincuenta tractores avanza imparable hacia Xestoso (Silleda). No es una de las míticas tractoradas de antaño en defensa del sector lácteo. La razón que ha reunido a tanto vehículo agrícola en plena crisis del campo es festiva. Es la octava edición de la Festa do Tractor, promovida por la Asociación Galega de Maquinaria Agrícola Clásica. A ella acuden religiosamente los devotos de los tractores antiguos y los coleccionistas de piezas restauradas.

Cuenta el presidente del colectivo, Manuel Iglesias, que en Deza la fiebre por los tractores antiguos crece. «Cada vez hai máis xente que os restaura e os colecciona», explica. «Antes a esta festa viña xente de toda Galicia, cada un co seu tractor. Agora non é preciso. Traelos desde lonxe é caro porque hai que contratar transporte e o desprazamento é custoso. A xente de fóra sigue vindo, pero agora hai menos mobilidade de máquinas. Sacan os tractores de xente de aquí, onde xa hai un número considerable de coleccionistas», explica.

Entre el ejército de máquinas hay Barreiros de los 60, Ebro y Renault. Llevan cientos de hectáreas labradas pero lucen brillantes como si nunca hubiesen tocado tierra. Junto a las reliquias de museo están aparcados también dos John Deere de última generación, con cabina climatizada y mandos robotizados. «Sempre é bo comparar. Hai un abismo en tamaño, tecnoloxía e confort, pero para o campo foi un salto máis alto pasar dos apeiros tirados por animais ás máquinas», explica Iglesias. «O campo é algo vivo, que se move, que evoluciona. Nós queremos reivindicar o papel dos primeiros tractores no progreso do agro», cuenta. «Pero isto sigue», dice. Los John Deere de hoy serán vintage mañana.