«Que non nos corten as ás»: el grito de una joven en un día de lazos violetas y reivindicaciones

m?. ?h. PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

26 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Da igual que ayer el sol se empeñase en salir y ofrecer un cielo azul celeste. En Pontevedra y en toda su comarca fue un día realmente negro. Y no precisamente a cuenta del black friday que llenó los comercios. Fue negro porque ese fue el color elegido para hacer visible la lacra que, como ayer se oyó por boca de algunos políticos, debería sacarnos los colores a todos, hombres y mujeres. Se trata, lógicamente, de la violencia machista. Hubo ciudadanos vistiendo camisetas negras a raudales, los niños y adolescentes pontevedreses se pusieron de luto e hicieron una cadena humana, las solapas se llenaron de lazos violetas, hubo minutos de silencio y concentraciones aquí y allá... Es casi imposible contabilizar los actos. Pero lo que sí puede narrar son algunas de las emociones vividas.

A las diez y media de la mañana, una mujer, Sax, pintaba un grafiti en A Ferrería. Conforme el espray avanzaba, Sax esbozaba sobre un muro blanco una sola imagen, pero con la cara y la cruz de una misma moneda: «Si se mira de una forma es una mujer agachada, mirando hacia abajo. Pero si se visualiza de la otra es una mujer de espaldas, mirando al cielo, libre», señalaba la artista. No fue solo ella quien puso palabras a este acto, que formaba parte de un proyecto de la Diputación. También lo hizo Carmela Silva, que dio elocuentes cifras de lo que supone la violencia machista en España y dijo que nuestra sociedad no será decente hasta que la frene. El alcalde pontevedrés, por su parte, pidió acabar con ese mantra «del la maté porque era mía».

Tras ellos, la cadena humana de los niños y adolescentes. Y una frase hermosa de una niña que un altavoz propagaba en A Peregrina: «Que non nos corten as ás». Pues eso, justamente eso.