El delantero asegura que cumplió los objetivos que le impuso el Mallorca, que no quiso integrarlo en su primer equipo
16 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Mateu Ferrer Cabrer (Inca, 1990) es la gran apuesta del Pontevedra al gol.
-Veintisiete goles la pasada temporada, ¿qué tiene en las botas?
-Mucho trabajo y compromiso, y después llegan los goles.
-¿Veintisiete son suficientes para demostrar que uno pertenece a una categoría superior?
-Eran veintiocho, pero bueno, me da igual. He intentado demostrar que con estos goles puedo jugar en Segunda B, y ahora que estoy aquí, en Pontevedra quiero demostrarlo y a ver si hay suerte y también entran.
-¿Es una cuestión de suerte?
-No, no creo que sea cuestión de suerte. Pienso que los goles llegan cuando uno trabaja, cuando tiene un equipo bueno detrás, los compañeros también influyen. Quieras que no, si tienes compañeros buenos y tú trabajas diariamente, los goles tienen que llegar sí o sí.
-¿Tuvo muchos pretendientes?
-Este verano he tenido la suerte de tener muchos equipos del grupo 3, del grupo 4, de todos los grupos, y al final me decanté por Pontevedra porque es un proyecto muy ilusionante, un estadio muy bueno, un histórico y me hablaron muy bien de la ciudad y de la gente, y al final fue fácil decidir.
-Además del ambiente y el estadio, como proyecto de equipo, qué le hizo desechar las otras?
-Un poco todo: un buen estadio, césped natural, un buen proyecto, un club histórico y la insistencia de toda la directiva, de la presidenta, de todos un poco, me ayudó a decidir.
-Fue un fichaje un poco tardío...
-Me hubiese gustado más decidir antes, haber hecho la pretemporada con el equipo, pero teníamos varias ofertas y hasta el final no hemos podido decidir dónde salíamos. Y ahora que lo hemos hecho estoy muy contento y con muchas ganas de demostrar y de empezar.
-¿Qué sabe de Luisito?
-Me han hablado muy bien de él, me han dicho que es un míster muy bueno, muy experimentado en la categoría.
-¿Qué va a aportar al Pontevedra?
-Vengo para ayudar al equipo, para sumar y, más que nada, me considero una persona trabajadora, y quiero trabajar mucho para demostrar al Pontevedra que no se ha equivocado conmigo.
-¿Y el equipo a usted?
-Es un equipo que está en las posiciones de arriba y, si consigo jugar y hacerlo bien, es un escaparate para el día de mañana, quién sabe, poder aspirar a triunfar en el mundo del fútbol. Pero tampoco me planteo ahora mismo qué me puede dar, sino trabajar día a día, y ya llegarán las cosas.
-¿Se ve la temporada que viene en Segunda o es un poco precipitado?
-Soy una persona que prefiere ir día a día, partido a partido. Suena a tópico pero es así. No me planteo el año que viene estar en segunda, me planteo hacer una buena temporada a fin de año, marcar goles, y el año que viene ya ser verá dónde.
-No pudo subir al primer equipo de Mallorca por la licencia, ¿no?
-Así fue, si subía no podía volver a bajar, ya que tenía más de 23 años, y ya no podría bajar para ayudar a promocionar al filial.
-¿Le sorprendió que no le subieran al primer equipo?
-Yo hice todo lo que pude, tengo la conciencia tranquila de haber trabajado al máximo y haber ayudado al máximo al club, y me voy tranquilo porque hice una buena temporada. Todo lo que se me pidió lo cumplí: quedar primeros, ascender y meter muchos goles, y así fue. Así que me voy con la conciencia tranquila, y les deseo lo mejor a ellos. Sobre lo de sorprender, es una decisión suya y en el fútbol siempre pasan cosas y se tiene que aceptar.