Personas nuevas

Roberto Antón PSICÓLOGO

PONTEVEDRA

26 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Existen numerosas evidencias de la plasticidad del sistema nervioso del ser humano, y lejos de las ideas tradicionales que apuntaban a que el cerebro era un órgano en progresiva decadencia, al cual el paso de los años iba provocando un deterioro continuo como consecuencia de la muerte neuronal, de un tiempo a esta parte se está evidenciando la coherencia de aquellos planteamientos que señalan que las conexiones entre las células cerebrales se fortalecen y mejoran con el paso del tiempo. Además, gracias a la medicina y a los avances tecnológicos, hemos sido testigos de un incremento en la esperanza de vida, y los que hace unas decenas de años eran considerados ancianos, ahora mismo están viviendo una segunda juventud.

Nunca me cansaré de contemplar experiencias vitales que resultan conmovedoras, y que a pesar de que algunas personas las puedan considerar pequeñas, suelen estar cargadas de ingredientes como el esfuerzo, la superación, y el impulso por mejorar. Todos conocemos a una persona sedentaria que se ha puesto a hacer deporte y ha logrado finalizar su primera carrera de varios kilómetros de distancia, o tenemos un amigo al que se le ha dado por escribir, y ha publicado su primera novela en puertas de la cincuentena, o aquella persona que ha retomado sus estudios y ha sido capaz de superar unos niveles académicos que, hasta hacía unos meses, le parecían inalcanzables.

Si cabe, mayor mérito tienen todas aquellas empresas que se realizan en solitario, donde solamente es reconocida la victoria a través de la consecución del objetivo final, y cuyo camino es arduo, sinuoso y poco agradecido. Es como jugarse todo a una carta, en la cual hay mucho que ganar, pero también bastante que perder en tiempo, esfuerzo y dedicación. Quizás más allá de la recompensa final, pueda existir una recompensa invisible, solitaria y poco valorada. Una persona que ha logrado sacrificarse durante meses o años para conseguir algo es una persona nueva, ya no es la misma que cuando empezó, sin duda es alguien que ha descubierto algo que desconocía más allá del resultado obtenido al final del camino. Este aprendizaje será aún mayor del adquirido a través del estudio de miles de páginas ya que nadie se lo habrá enseñado.