Teucristas que golean sobre arena

manu otero PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

RAMON LEIRO

Amérigo y Víctor Rodríguez preseleccionados para el mundial

24 may 2016 . Actualizado a las 15:25 h.

Ser el portero más bombardeado de la liga Asobal o uno de los jugadores más efectivos desde corta distancia parece no ser suficiente reto para los teucristas Ricardo Amérigo y Víctor Rodríguez que cada verano sacian su sed competitiva disputando torneos regionales y nacionales, que poco tienen que ver con las pachangas playeras típicas del verano, sobre la arena de las playas de Almería y Vigo. Tal es el nivel que exhiben en el Carbotocaíto y en el Painkillers que el seleccionador nacional Jaime Osborne puso sus ojos en las dos perlas teucristas para formar parte de la convocatoria de España para preparar el asalto a la copa del mundo que se celebra en Budapest del 12 al 17 de julio.

«Al acabar la liga nos vamos cinco días a Málaga a la concentración, nos convocaron a quince, aún tienen que descartar a cinco», explica el vigués Víctor Rodríguez que ya fue preseleccionado el pasado año para el europeo pero acabó descartado. «En España tenemos un nivel bastante alto, el año pasado fueron subcampeones de Europa así que esa semana habrá que hacerlo bien para que te convoquen», explica Rodríguez que no quiere volver a quedarse fuera.

Si Rodríguez ya pudo vestir la roja una vez, para Amérigo será como un regreso a la adolescencia, ya que formó parte la selección cuando aún era júnior. «Es un orgullo volver a la selección», sostiene el portero teucrista que ve la variedad playera del balonmano como un deporte «más dinámico, más corto y en el que hay más sorpresas», enumera. Una sorpresa sería verle a él lejos del arco. Lo intentó pero «vieron que aportaba más en la portería», acepta con resignación su intento frustrado de convertirse en jugador de campo.

Aunque en esta modalidad, los porteros tienen más ventajas. Con balón actúan como un atacante más y se les conoce con el nombre de especialistas. En equipos de cuatro jugadores, un gol del guardameta vale doble, al igual que lanzar con un giro en al aire. «Es más espectacular», resume Rodríguez que lleva siete años compitiendo sobre la arena. Ambos agradecen que el club les deje jugar aunque niegan que haya riesgo de lesiones.