El Teucro estrena Asobal con un triunfo

Carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Los azules hicieron un juego compacto e intenso frente a un Guadalajara que estuvo cerca

05 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Teucro volvió ayer a brillar en el pabellón municipal gracias a una defensa férrea, valiéndose principalmente del bloque de la pasada temporada, y un ataque ordenado aderezado con la explosividad del debutante Balenciaga.

Le regaló el Guadalajara los primeros minutos al Teucro para que este pudiera estrenar su vuelta a Asobal como merece: con una ventaja de entre cinco y seis goles durante el primer cuarto de hora (9-3). No fue hasta poco después del minuto 15 cuando el técnico del Guadalajara pidió un tiempo muerto para reorganizar su defensa. Fue precisamente una de las estrellas más esperadas del partido, el portero del equipo castellano, Hombrados, exjugador de la selección nacional, el que dio una de las mayores sorpresas durante los primeros minutos de juego. En el 8 apenas había logrado parar dos goles, pero había encajado seis. Tampoco el resto del equipo visitante estuvo más acertado. 

Fue a partir de una reordenación de sus efectivos cuando el partido empezó a cambiar de color. Pasaron de una defensa 6-0 a una 5-1 y, con poco más de tino que sacaron de su reserva pusieron de manifiesto la igualdad existente entre ambos cuadros, llegando al descanso con solo un gol de desventaja (13-12).

Salió el Teucro tras el descanso con la lección aprendida, y aprovechó para darle otra al Guadalajara. Era sobre concentración e intensidad. Formaron una defensa sólida haciendo un ataque efectivo sin arriesgar. De manual jugaron y de manual fue la distancia que fueron cogiendo respecto a los visitantes, hasta volver a colocarse a seis goles de ventaja en el minuto 15 de la segunda parte (23-18). Y así se mantuvo otros cinco (24-19).

Aunque en los siguientes minutos el Guadalajara se empeñó en recortar la ventaja que lo mantenía alejado del equipo azul y, por tanto, de la victoria, no lo logró, y a menos de un minuto del final del partido afición y jugadores ya estaban celebrando su primer triunfo de la vuelta a Asobal. Fue tras estar al borde, como mínimo del empate. Fue, posiblemente, el partido que tenía en mente Quique Domínguez cuando imaginaba su regreso a la primera línea del balonmano.