La Xunta no repintará el paso entre las salinas y el acceso de A Lanzada

Marcos Gago Otero
marcos gago SANXENXO / LA VOZ

PONTEVEDRA

MARTINA MISER

Medio Ambiente sostiene que la señalización no cumple con la normativa

18 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Sin marcha atrás, la Consellería de Medio Ambiente no está dispuesta a reponer el paso de cebra que hace dos veranos enlazaba un camino que atraviesa las salinas en A Revolta (Noalla) y comunicada con uno de los accesos a pie a la playa de A Lanzada. Los escasos metros que ocupaba el pintado del paso peatonal sobre el asfalto de la PO-308, de titularidad autonómica, tienen que seguir libres de las rayas discontinuas para los viandantes. La razón está en que no es un lugar adecuado desde el punto de vista de la seguridad vial, según la consellería, aunque este criterio no lo comparten ni los miles de usuarios de la playa ni el Concello de Sanxenxo.

El paso de cebra no existe sobre el terreno, pero sí lo hace en una especie de realidad virtual o memoria colectiva de los vecinos de A Revolta y los usuarios de A Lanzada. Cientos de personas siguen atravesando la carretera autonómica para ir y venir entre la playa y las viviendas y hoteles próximos, sin importar que en el asfalto no haya nada pintado, más allá de un stop en la intercesión que deben respetar los coches que circulen hacia la PO-308 desde las salinas.

La Xunta es tajante. «O paso de peóns antigamente existente foi eliminado dado que este treito non reúne os requisitos necesarios para a súa colocación atendendo á normativa vixente». ¿Y cuáles son esas características que Medio Ambiente echa en falta? La respuesta a esta pregunta es que fundamentalmente no se trata de un entorno urbano.

El cruce en cuestión «non se trata dun treito urbano que conte con beirarrúas, nin tampouco con iluminación, polo que non se pode garantir a seguridade viaria dos peóns ao utilizar o paso». Esta es la justificación aducida por la Consellería de Medio Ambiente para negar la solicitud reiterada de vecinos, veraneantes y Concello. Algunos de los afectados señalan que, esta respuesta tiene el inconveniente de que si se aplicase de forma estricta impediría tener pasos de cebra en toda la playa de A Lanzada, porque a lo largo de este popular arenal, no hay ningún tramo urbano, ni aceras.

En el seno del cuatripartito sanxenxino se ha recogido la inquietud de los vecinos del entorno ante la falta de una solución positiva por parte de la Xunta. El alcalde, Gonzalo Pita (SAL), ha pedido una entrevista formal con el responsable de Infraestruturas para analizar el conflicto.

Los trabajos para dotar de seguridad vial a la PO-308 comenzarán el próximo año.

La Consellería de Medio Ambiente se ratificó en su intención de desbloquear, por fin, el proyecto de seguridad vial de la PO-308, aunque solo sea en principio en el tramo entre la rotonda de acceso a A Revolta, justo a la entrada del istmo de A Lanzada y el lugar de Soutullo, cerca de la playa de Major. «A Consellería de Medio Ambiente ten previsto licitar as obras a finais deste ano», manifestó un portavoz de la Administración gallega. La actuación comprende un carril para uso peatonal y ciclista, para evitar que los usuarios tengan que circular por arcén, allí donde lo haya, o por la calzada.

Sobre el polémico cruce, según indicaron fuentes del caso, no está previsto su repintado tampoco en esta reforma viaria. Desde el Concello, por su parte, se están sopesando varias opciones, que se expusieron a la jefa del servicio provincial de Costas en una visita reciente a Sanxenxo. Existe la posibilidad de una pasarela o de marcar un sendero peatonal hasta un paso de cebra que se pintaría en un punto más o menos cercano, pero que se estimase más seguro para los usuarios.