«La Brilat es, en gran medida, una brigada de gallegos y de pontevedreses»

Alfredo López Penide
lÓPEZ pENIDE PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

El general de brigada Luis Cebrián Carbonell, en su despacho de la base «General Morillo».
El general de brigada Luis Cebrián Carbonell, en su despacho de la base «General Morillo». Ramón Leiro< / span>

Ser núcleo de la primera Brigada de Muy Alta Disponibilidad: «Es el gran reto»

05 jul 2015 . Actualizado a las 05:05 h.

Tras el esfuerzo del despliegue simultáneo en Afganistán, Mali y Antártida, la Brilat enfila la recta final de su preparación para asumir un reto que la mantendrá ocupada los dos próximos años: constituir el núcleo de la primera Brigada de Muy Alta Disponibilidad (Very High Readiness Joint Task Force o VJTF) de la OTAN. «Es el gran reto que tenemos y que es lo que nos espera para el 2016 y el 2017. Va a suponer una importante carga de trabajo. Tiene la gran ventaja de que involucra a una enorme parte de la Brilat», remarca el general jefe de la Brilat, Luis Cebrián Carbonell.

-Para la gente de la calle, ¿qué es esta brigada? ¿Qué supone?

-Es una capacidad que la OTAN tiene a su disposición, a la que los países aliados aportan fuerzas para generar, y que tiene como misión dar un elemento de muy alta respuesta que sea capaz de responder en plazos muy cortos a cualquier contingencia que se pueda aparecer en el ámbito de la Alianza Atlántica.

-Su generación está coincidiendo con la reestructuración del Ejército. ¿Cómo afectará a la brigada pontevedresa?

-Le va a afectar relativamente poco. En un aspecto muy positivo, en cuanto al reequipamiento de materiales. De hecho, ya hemos recibido algunos de los nuevos equipos que deberemos utilizar en la generación de la VJTF, concretamente vehículos blindados tipo Vamtac y de comunicaciones.

-Transcurrido el tiempo, ¿cómo valora el esfuerzo que han supuesto estas tres misiones?

-Realmente han sido dos, desplegar una fuerza de asesores en Mali y una fuerza de seguridad en Afganistán. Lo valoró positivamente. La misión se ha cumplido con éxito y eficazmente, como suele ser el caso con las misiones que acomete la brigada aerotransportable. Nos llena de satisfacción el poder haber regresado con la misión cumplida y la satisfacción del deber cumplido.

-¿Qué es lo más complicado?

-Cada tipo de misión tiene sus complejidades. Complicados son algunos aspectos del planeamiento, el apoyo logístico, aunque eso no es responsabilidad de la Brilat. En algunos casos, es complicada la generación, pero son dos tipos de operaciones para las que estamos perfectamente capacitados para llevarlas simultáneamente. Tenemos experiencia en preparar, en proyectar y en sostener y no es un reto que nos supusiera un trabajo o una dedicación excepcional.

-¿Y la Campaña Antártica?

-Sí, pero se trata de dos casos singulares, de dos oficiales de la Brilat, que han estado desplegados durante tres meses y medio, que se integran dentro de una misión que no genera específicamente la Brilat. Es una participación de miembros de la brigada en una misión que se genera por la Fuerza Logística Operativa.

-Siempre se ha dicho que los militares son gente de acción. ¿No siente envidia sana cuando sus soldados se van de misión?

-Hombre, siempre preferirías marcharte con ellos, pero también eres consciente de que tu puesto está donde te toca. Como capitán, teniente coronel e, incluso, como coronel ya tuve mi oportunidad. Eso con respecto a Mali o Afganistán, porque, con relación a la VJTF, estoy absoluta y plenamente implicado. Como jefe de la Brilat, voy a ser durante esos dos años el jefe de esa fuerza. Ahí no tengo tiempo para sentir envidia porque tengo mucho trabajo por delante.

-Y este incremento de trabajo, ¿influye en su vida personal?

-Bueno, no es nada a lo que la familia no esté habituada. Todos los que vestimos el uniforme estamos acostumbrados a sobrellevar un ritmo de trabajo, en general, intenso y que coge algunos picos en situaciones como estas. Mi familia, como la de todos los componentes de la Brilat, está habituada a estas situaciones y lo sabe sobrellevar.

-¿Cuál cree que es la percepción que tiene la sociedad pontevedresa de la Brilat y sus soldados?

-Socialmente es una institución altamente reconocida, ya no solo por las instituciones, sino por la gente de la calle. Es algo que se percibe muy claramente cuando vienes de otro sitio donde la presencia de las Fuerzas Armadas, quizás por el volumen de la ciudad, está más difuminada. La gente reconoce a los soldados de la Brilat, son parte de la sociedad pontevedresa y el prestigio social del que disfruta es muy alto. Se nota en el afecto, pero es que esta es, en gran medida, una brigada de gallegos y de pontevedreses.

lUIS CEBRIÁN gENERAL DE LA BRILAT

La Brilat: Un año de retos