Una denuncia por violencia de género derivó en un decomiso de drogas y armas

Alfredo López Penide
L. Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Las defensas de los dos acusados intentaron que la Audiencia anulase el procedimiento argumentando que el registro no tenía amparo legal

01 jul 2015 . Actualizado a las 05:05 h.

Las defensas de los dos acusados de tráfico de drogas y tenencia ilícita de armas trataron ayer de que la Audiencia de Pontevedra anulase todo el procedimiento en el que el fiscal solicita doce años de cárcel para cada uno de los acusados.

Los abogados sostuvieron que la entrada y registro en el bar y vivienda en la que se halló la droga y las armas no estaba amparada judicialmente. Así, sostuvieron que se trata de dependencias anexas y el registro no fue autorizado por un juez, ni por ninguno de los moradores, así como tampoco se daba la circunstancia de un delito flagrante que hubiese permitido a la Guardia Civil realizar esta inspección.

Añadieron que fue la expareja de uno de los encausados la que les franqueó el acceso a los agentes en el marco de una denuncia por violencia de género, de la que, por cierto, el encausado resultó absuelto. Añadieron que, en todo caso, la vista debería suspender por la ausencia de esta mujer.

También el testimonio de esta se consideró imprescindible por el fiscal, quien, no obstante, incidió en que los agentes registraron la zona de bar y que, en el momento que llegaron al pasillo que conducía a las habitaciones privadas, se detuvieron y solicitaron una autorización judicial.