Ence pedirá licencia de obra para reducir su impacto visual

Marcos Gago Otero
marcos gago MADRID / LA VOZ

PONTEVEDRA

Propuesta ganadora para la integración paisajística de Ence.
Propuesta ganadora para la integración paisajística de Ence.

La fábrica rebajará al mínimo los efluentes al mar y tapará las balsas

29 abr 2015 . Actualizado a las 10:46 h.

El consejero delegado del grupo Ence, Ignacio de Colmenares, anunció ayer que la empresa pedirá ya la licencia de obra para aplicar el proyecto de mejora del impacto paisajístico de su fábrica de Pontevedra. Se trata de una iniciativa a la que destinará entre cuatro y cinco millones de euros, quiere empezar la obra tras el verano y calcula que estará lista en cuestión de entre seis y nueve meses. Colmenares señaló que confía en que a finales de este año esté ejecutada la mayor parte de esta actuación. Se trata de uno de los gestos con los que Ence quiere convencer a una amplia mayoría de los pontevedreses de que la fábrica es compatible con el medio ambiente y su actual ubicación en Lourizán. El consejero delegado de Ence precisó: «Si los habitantes de Pontevedra ven que la fábrica está disimulada en el paisaje e integrada en el entorno, no huele, no suelta agua a la ría, no hace ruido y genera empleo, la mayoría a favor de su permanencia será absoluta».

En la misma línea de actuación, intervino el presidente de Ence, Juan Luis Arregui, en la junta anual de accionistas en Madrid. «Ence no va a defraudar a Pontevedra». Reiteró el compromiso con el medio ambiente, la generación de riqueza y empleo y la modernización de la fábrica para recuperar su competitividad. «Entiendo y comparto que la población de Pontevedra nos exija que tengamos una fábrica ejemplar» en materia ambiental.

Arregui agradeció los apoyos realizados públicamente por colectivos sociales y algunos de los partidos políticos gallegos a la continuidad del complejo pastero en Lourizán.

Louzán y el alcalde de Navia

Solo por citar un ejemplo, a nadie le pasó inadvertida la presencia de Rafael Louzán, presidente provincial del PP y de la Diputación, en la junta de accionistas de ayer en calidad de invitado. No era el único político presente, porque también estaba el alcalde socialista de Navia.

Conscientes del reto de ampliar sus apoyos en la opinión pública, tanto Arregui como Colmenares incidieron en el objetivo de suprimir el impacto oloroso del complejo de Lourizán. El consejero delegado de Ence precisó que en el 2010 se registraban 140 minutos con impacto oloroso al día y añadió que en el 2014 ya solo fueron 3,6 minutos. La meta es que sean cero y este es el compromiso que se asumió en la junta de accionistas.

También se está trabajando en la reducción del uso del agua del Lérez hasta dejarlo en un porcentaje muy pequeño. Para lograrlo, afirmó que se está trabajando con una empresa puntera en tratamiento de aguas en una nueva depuradora. Esto permitirá la reutilización del agua de proceso, limitando extraordinariamente el efluente a la ría.

Asimismo, Ignacio de Colmenares adelantó que las balsas de decantación del complejo se someterán a secado, un gestor autorizado llevará los lodos del fondo para su tratamiento y estas piscinas se taparán.