La polémica por la planta de compost de A Canicouva capitalizó esta mañana el debate en el pleno de la Diputación
27 mar 2015 . Actualizado a las 13:23 h.La planta de compost que el Concello de Pontevedra plantea levantar en A Canicouva capitalizó esta mañana el pleno de la Diputación de Pontevedra con acusaciones mútuas entre los tres partidos presentes. En una sala tomada por los vecinos opositores a este proyecto, el presidente Rafael Louzán no dudó en invitar a socialistas y nacionalistas a encerrarse «nun cuadrilatero e dense de leches».
La sesión, en la que se guardó un minuto de silencio por las víctimas del Airbus, arrancó con los vecinos mostrando su oposición a los que calificaron de «Sogama del Sur», que consideran provocará «malos olores, la contaminación de las aguas que se utilizan en las casas para beber, cocinar, aseo personal... en muchas parroquias y barrios». Asimismo, criticaron al BNG, poniendo el acento en el alcalde Fernández Lores y en el concejal César Mosquera, por «su prepotencia, chulería y prácticas antidemocráticas».
El portavoz socialista Santos Héctor se posicionó con los vecinos y, al tiempo, exigió un pronunciamiento claro del presidente de la Diputación. Rafael Louzán precisó que es el Concello de Pontevedra el que adquirió el compromiso de facilitar la mejor ubicación para la planta, así como criticó al deslealtad socialista con sus compañeros en el gobierno municipal, a los que acusó de intentar sacar un rédito político de esta cuestión. Fue, en este punto, en el que invitó a ambos partidos a solventar sus cuestiones en un cuadrilatero, así como se mostró convencido que si no se alcanza el consenso, el proyecto de A Canicouva no saldrá adelante.
Instantes después, César Mosquera (BNG) rebatía tal posibilidad al anunciar que «vamos a seguir adiante. Non nos vai temblar a man», siempre y cuando los resultados electorales del 24 de mayo se lo permitan, según reconoció.