Tras las citas egipcias de Alejandría y Luxor, la luchadora caldense parte hacia Suiza junto a la marinense Katya Calvar
05 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La vida de una deportista de élite como Lúa Piñeiro está irremediablemente ligada a un apretado calendario de competiciones y a la dictadura de los horarios de los vuelos internacionales. Tal es el nivel de exigencia por acumular puntos para las grandes citas mundiales que la taekuondista caldense pasa una media de cuatro días al mes en su casa, rodeada de su familia.
Actualmente presume de atravesar un momento dulce en lo físico y en lo mental. La plata cosechada en el Open de Alejandría y el hecho de haber participado en el G2 de Luxor (a pesar de caer en cuartos de final) le aportan puntos importantes para su ránking personal, pensando en acudir al Mundial y a los Juegos Olímpicos.
Lúa asegura que «la valoración general de las citas de Egipto es bastante buena porque permitió ver el nivel que tenemos y certificar que no existen grandes diferencias».
Tras descansar y deshacer las maletas, piensa ya en su próximo compromiso. La meta seguirá siendo colgarse la medalla de oro. En Suiza, este próximo fin de semana, representará al combinado gallego, en el que también estará la marinense Katya Calvar. Precisamente ellas dos fueron las grandes protagonistas del último Campeonato de España en la categoría de -67 kilos, título que cayó en el punto de oro del lado de la caldense.
La cita suiza será de G1 y ambas intentarán aprovechar su gran momento para certificar que el taekuondo pontevedrés está en la élite de este deporte con nombres propios que se han convertido en rivales a batir.
Con Holanda en el horizonte
Tras competir en el país helvético la siguiente gran cita (G2) será en Holanda. Ahí, gracias a los puntos en juego y a la cercanía geográfica, se darán cita las número uno del panorama internacional. Lúa confía en salir bien parada de este nuevo examen.