El cabecilla de la red hará frente a una condena de cinco años y una multa de 1,6 millones
01 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La Audiencia de Pontevedra no creyó al narcotraficante Roberto Leiro que su vinculación con el mundo de las drogas fuese «una ruina total», tal y como manifestó en el juicio celebrado en enero. Es más, considera que, gracias al narcotráfico, «se ha venido enriqueciendo con el producto de la venta de sustancias estupefacientes».
Sobre esta base, los magistrados lo acaban de condenar a cinco años de prisión por blanqueo de capitales procedentes del tráfico de drogas, pena a la que acompaña una multa de 1,6 millones de euros. En la misma resolución se le impone idéntica condena, pero se rebaja la sanción económica al millón y medio de euros, a la mujer del narcotraficante, María Teresa Señoráns Cores.
En su caso, se le considera testaferro de su marido. Y no fue la única: «Con la finalidad de ocultar el patrimonio obtenido de las referidas actividades ilícitas», durante el período de tiempo comprendido entre los años 1995 y 2003, se concertó con su esposa María Teresa Señoráns Cores, su hija Nuria Leiro Señoráns -tres años y medio cárcel y 170.000 euros de multa- y sus suegros Jose Señoráns Señoráns y la esposa de este Balbina Cores Piñeiro -ambos condenados a tres años y medio y al pago de 55.000 euros-. Asimismo, también «consintieron en figurar como titulares de determinados bienes cuyo verdadero propietario era Roberto Leiro» las hermanas de Teresa, Josefina y María del Carmen Señoráns Cores, así como el esposo de esta, Juan Torres Valverde, sobre quienes recayeron seis meses de prisión por imprudencia grave.