El Sergas puede empezar la obra después del permiso concedido ayer
12 dic 2014 . Actualizado a las 07:38 h.Tres ubicaciones, cinco gobiernos locales y dieciocho años después de que se empezase a hablar del centro de salud de Marín, la junta de gobierno local dio ayer la licencia de obra al Sergas para poder comenzar los trabajos del ambulatorio. La alcaldesa, la popular María Ramallo, explicó los pormenores del proyecto y del trámite administrativo, en una comparecencia pública con el grueso de sus concejales. Para ella, que era una recién llegada a la política en 1996, cuando la corporación presidida por Augusto Casal (PP) inició las gestiones para adquirir una parcela para el centro de salud, la licencia de ayer es la culminación de un largo proceso, lleno de baches, pero que ahora podrá llegar a buen puerto.
La razón de tanto retraso fue la dificultad urbanística de Marín durante más de treinta años. Si ya es complicado poner de acuerdo a los dueños de terrenos para comprarlos, hubo que lidiar con los problemas de las otras dos ubicaciones y después una tensa negociación con el Invifas (actual Invied), propietario entonces de la urbanización Virxe do Carme (Suboficiales) donde se construirá el centro.
Al equipo de gobierno actual le tocó conseguir el visto bueno de Augas de Galicia, Fenosa, Sanidade y Patrimonio para subsanar los diferentes problemas urbanísticos y jurídicos que se presentaron. Solucionados estos obstáculos, ahora todo el camino queda libre para el Sergas, que licitó la obra el pasado verano y que aún tiene que fallar el concurso público, al que se presentaron 17 empresas. No obstante, Ramallo explicó que ahora el reloj de la obra empieza a correr y que la adjudicación es inminente. El concejal de Urbanismo, el popular Manuel Santos, indicó que, «como muy tarde», los obreros estarán trabajando en la parcela de O Souto en febrero. La regidora confía en que se adelante el trámite y estén ya en enero.
El Centro de Salud de Marín tiene un plazo de 17 meses para su construcción, aunque el Sergas le comunicó al Concello que existen varias ofertas que rebajan este período y que este es un baremo a tener en cuenta a la hora de adjudicar.
Paralelo a la obra del ambulatorio, que ya tiene su proyecto constructivo aprobado, el Concello tendrá que desviar el curso del río hacia las fincas de O Souto, que probablemente se expropien si no hay acuerdo con los dueños. La idea es poder garantizar los cinco metros de ancho de la franja de seguridad del río.
El centro de salud tendrá bajo y dos plantas y reunirá todos los servicios que en la actualidad se prestan en el local sanitario de la calle de A Estrada y en la Casa del Mar. También será la base de las ambulancias del 061 y del Punto de Atención Continuada (PAC).