Habrá siete sensores de la Universidad repartidos por el casco urbano
21 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Habrá datos en tiempo real, que serán accesibles a través de una página web
Pontevedra utilizará tecnología de última generación, vía satélite, para controlar en tiempo real los niveles de ruido y de calidad del aire en el casco urbano. El convenio firmado a principios de este mismo mes por el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), y el rector de la Universidade de Vigo, Salustiano Mato, permitirá desarrollar en la ciudad un sistema experimental vinculado a un programa de investigación que ya ha colocado dos satélites en el espacio y tiene el tercero casi listo para su lanzamiento.
El concejal de Infraestructuras, César Mosquera (BNG), dio cuenta ayer de la aplicación inmediata del convenio en la ciudad, por el que el Concello aporta 36.000 euros anuales para fomentar la investigación en la Universidad olívica. Aunque hay dos líneas de investigación, a corto plazo solo se implantarán en la ciudad los sensores que permitirán analizar la calidad del aire y el nivel de ruido ambiental. Para más adelante se deja la aplicación práctica de las investigaciones en calidad del agua y nivel de humedad en el suelo.
Mosquera concretó que serán siete los sensores que se distribuirán por el casco urbano, en principio, a lo largo del primer trimestre del próximo año. Su ubicación precisa aún no ha sido determinada. Lo que sí se sabe es que estos elementos permitirán disponer de datos en tiempo real sobre la concentración de dióxido y de monóxido de carbono, de partículas en suspensión y de gases de efecto invernadero, entre otros parámetros medioambientales que sirven para medir la calidad del aire. Además, también servirán para controlar el ruido ambiental en la ciudad, un dato del que actualmente no existen referencias fiables.
La idea del Concello es que todos los datos que aporten los sensores se pongan a disposición de todos los ciudadanos a través de una página web. El problema apuntó Mosquera, es desarrollar un programa que permita interpretar la avalancha de datos que aportarán los siete sensores.
Como ejemplo del paso adelante que supondrá este nuevo sistema, Mosquera recordó que en Vigo y A Coruña solo hay dos puntos de medición de la calidad del aire, y en el resto de ciudades gallegas, uno solo.
Los datos de que se dispone en la actualidad sobre la calidad del aire en Pontevedra son los que aporta la estación ubicada en la carretera vieja a Marín, en las inmediaciones del acceso a Ponte Muiños. Se trata de una instalación de la Xunta que ofrece datos muy completos, pero que no reflejan la situación real del casco urbano. De hecho, ya se ha llegado a un acuerdo con la Xunta para trasladar esta estación al centro, concretamente a Campolongo.