Voluntarios buscan voluntarios

carmen garcía de burgos PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

CAPOTILLO

El Banco de Alimentos necesita 400 colaboradores para la «Operación kilo» del 28 y 29 de noviembre. Todo lo recaudado será para familias de la ciudad

31 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

De las 2.200 personas que colabora en los distintos bacnos de alimentos de toda España, solo unas 40, el 1,7%, cobra. Vigo solo tiene un trabajador en nómina, los mismos que tendrá la delegación de Pontevedra cuando inaugure su sede, la segunda semana de noviembre. Son los encargados de atender los depósitos de alimentos y de realizar labores administrativas. Los demás, todos los demás, incluidos su presidente, delegados, secretarios, tesoreros y cualquier otro cargo con o sin responsabilidad, lo hacen de forma altruista.

Por eso es tan necesario encontrar voluntarios de cara a la Operación kilo que se celebrará los próximos días 28 y 29 de noviembre. Aunque la idea inicial era extender la iniciativa -que el año pasado se limitó a la zona sur de la provincia- a toda Pontevedra, los responsables de la entidad han preferido ir con paso lento pero seguro: solo habrá puntos de recogida de alimentos no perecederos en la ciudad del Lérez. O Salnés y Deza quedan pospuestos para futuras ediciones de una iniciativa que todavía va a cumplir sus dos años de vida. Tendrá presencia, así en superficies de Pontevedra, Baiona, Cangas, Moaña, Moaña, Ponteareas y Chapela-Redondela.

Errores y aciertos

«Esta campaña no va a ser más extensiva porque así nos lo aconsejaron quienes participaron en experiencias anteriores», explica el presidente del Banco de Alimentos de Vigo, Pedro Pereira. «Es preferible tener un volumen con cierta cadencia que acabar teniendo supermercados sin atender», añade.

Ese es precisamente el objetivo de la campaña de captación de socios. Para cubrir los 36 establecimientos alimentarios de la ciudad de Pontevedra harán falta unos 400 voluntarios: «Los bancos de alimentos son en un 50% los voluntarios, y es ese 50% el que hace que sean posible», señala Pereira.

También gracias a errores y aciertos cometidos en la pasada edición de la Operación kilo, la organización ha decidido facilitar al máximo la contribución de la gente. Una centralita conectada al número de teléfono 986263022 permitirá dar y recibir información a los interesados en participar en la iniciativa. «Alguien puede llamar y decir: yo puedo estar en el Mercadona de Pasarón el sábado de 4 a 6 de la tarde», apuntó el presidente de la entidad viguesa a modo de ejemplo.

De hecho, la idea es repartir a los voluntarios en grupos mínimos de dos en cada supermercado (algunos, si tienen dos accesos, pueden requerir de un segundo equipo) en turnos de 4 horas. Los grupos se amoldarán a los horarios de apertura de las diferentes tiendas, que abarcan entre las 9 y las 22 horas.

El Banco de Alimentos dispondrá, además, de un retén que acudirá para solventar posibles imprevistos. También los menores de edad mayores de 12 años podrán formar parte de la campaña siempre que vayan acompañados de un adulto.

Otro de los puntos que juegan a favor de la Operación kilo en Pontevedra es que todos los alimentos que se recauden en ella irán a parar a alguna de las 400 familias (unas 1.500 personas) que se encuentran en riesgo de exclusión en la propia ciudad. La donación se hará, como siempre, a través de entidades reconocidas y acreditadas para ejercer un mayor control sobre su destino final.

Reto convertido en ilusión

La delegación pontevedresa del Banco de Alimentos tiene otro reto convertido en ilusión por delante: la inauguración de su nuevo local, de 400 metros cuadrados -la mitad para zona de atención al público y recepción de donaciones, y la otra mitad para almacén de alimentos no perecederos- en Faustino Santalices, que tendrá lugar la segunda semana de noviembre.