La empresa de innovaciones forestales Orballo suscribió ayer un acuerdo con la Diputación para promover este proyecto
11 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.El primer té europeo de la historia procederá de O Areeiro, y ya tiene nombre: Orballo. Aunque finalmente no acabe siendo su denominación comercial, sí será, al menos, la marca que lo verá nacer. Todavía está en proceso germinal, pero lo cierto es que la Diputación ya cuenta con pequeñas muestras de la semilla de lo que en un futuro podría acabar siendo el primer té que se produce íntegramente en Galicia; es más, en España, Europa e, incluso, Occidente. A excepción de algunas plantaciones que existen hoy en día en México, en las Azores, en Albania y en Turquía, la pontevedresa sería, en cualquier caso, única. No solo porque sus características serían muy diferentes de las de las citadas, si no porque además, sería la que contaría con una mayor producción.
Sano y ecológico
Así lo aseguró ayer uno de los autores de este proyecto, Gerardo Lagares, socio director de la empresa de innovaciones forestales Orballo, quien firmó un convenio de colaboración con el presidente de la Diputación, Rafael Louzán. Se trata de una empresa coruñesa de reciente creación -tan solo dos años de vida- integrada por cinco jóvenes que se especializaron en productos ecológicos. Por eso, el proceso de elaboración de la infusión apenas tendrá impacto ambiental.
«Camellia sinensis»
La otra parte del secreto del primer té que verá nacer Europa está, precisamente, en O Areeiro, en manos de un equipo liderado por Carmen Salinero, y en el que también participan Pilar Vela y Ángeles Barros, entre otras trabajadoras de la estación fitopatológica. Carmen Salinero y sus compañeras aportan uno de los ingredientes más importantes para cualquier plan: el conocimiento. Ellas son las que cuidan los ejemplares de Camellia sinensis que solo se encuentran en esta plantación. Y son ellas también las que guardan todos los secretos que han conseguido elaborar una primera muestra de té verde procedente de estos árboles. Los que se comercialicen estarán mucho más fermentados y contarán con un tratamiento posterior por el que no han pasado todavía estas primeras pruebas. Pero es tan rico, sano y natural como será, posiblemente, el definitivo. «En ninguna plantación de té del mundo te dejan salir con una muestra de la planta, así que la labor de investigación para conseguir deducir el proceso de producción de la infusión es más complejo de lo que parece», explica Salinero.
En dos años, las hojas
A este procedimiento hay que sumarle la superación de barreras y obstáculos que puedan ir surgiendo a medida que se avance en él. Así, en un plazo de dos años podrán observarse las primeras hojas listas para transformarse en infusión, pero todavía quedarán muchos más pasos por dar. La plantación comercial constará de alrededor de unas 10.000 camelias, adelantó Lagares, quien puntualizó que la faceta comercial del proyecto es la que se encuentra en una etapa más inicial. Para cultivar todos los arbustos hará falta alrededor de una hectárea y medio de terreno. El sabor de la hoja y, por tanto, del té, dependerá en gran medida de dónde esté plantado, por lo que todavía queda por definir en qué lugar se dejarán crecer estas camelias. Por el momento, técnicos de O Areeiro ya han seleccionado los ejemplares más frondosos y que mejor se han adaptado a las condiciones climatológicas y de acidez de las tierras gallegas, entre otros factores.
Natural al 100 %
Entre otras novedades que comercializa en estos momentos Orballo destacan los arroces aromáticos a la carta: con flores, frutos y otras experiencias. Ellos mismos se definen en su web como «una pequeña industria artesanal: producimos, procesamos y vendemos plantas aromáticas ecológicas que estamos deseando que pruebes. Creemos que el cuidado, el cariño y respeto al medio ambiente a lo largo de todo el proceso se plasman en el resultado final de nuestros productos».