El Sergas tomó esta decisión hace unos días para evitar pagar peonadas
28 sep 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Las resonancias magnéticas de Vigo son las más activas de Galicia. Las máquinas hacen en torno a 25.000 pruebas al año, el doble que A Coruña, un hospital de tamaño similar. La lista de espera ha crecido en los últimos meses. Pero el Servizo Galego de Saúde (Sergas) ha decidido que el servicio vigués asuma una serie de pruebas para las que no es referencia en las áreas de Pontevedra y Ourense, además de todas las resonancias urgentes que surjan a partir de las tres de la tarde o en fin de semana y festivo en el área de Pontevedra-O Salnés.
La Dirección de Asistencia Sanitaria del Sergas se lo ratificó esta misma semana al servicio de Diagnóstico por Imagen de Vigo. Según fuentes del servicio, en Pontevedra la resonancia magnética está operativa por las tardes solo cuando se organizan peonadas, es decir, trabajo extra que se paga aparte a los facultativos. Ahora, interpretan esas fuentes, no se están pagando la actividad extraordinaria en el complejo pontevedrés y por eso se derivan a Vigo las pruebas. Eso sí, las ambulancias en los casos urgentes las costea el Sergas.
Según transmitió la dirección del Sergas, el Chuvi es referencia para Pontevedra para las resonancias con sedación, las artrorresonancias de cadera, las de difusión o perfusión de próstata y las resonancias fetales. En el caso de Ourense, lo es para las resonancias indirectas de cadera. En Galicia existe desde julio del año pasado una instrucción que organiza algunas especialidades en áreas de referencia, pero la resonancia magnética no está en esa normativa.
Un portavoz del Sergas asegura que en Vigo se realizan determinadas técnicas específicas que no se practican en otros hospitales. «Siempre ha sido así», explica. Pero en los últimos días, los propios radiólogos elevaron una queja interna por la sobrecarga de trabajo y el Sergas ratificó su decisión. Fuentes médicas advierten que la decisión de generalizar las urgencias de resonancia pontevedresas en Vigo sí es nueva.
El sindicato médico CESM entiende que se está sobrecargando al hospital de Vigo a pesar de su elevada lista de espera. «En Vigo siempre es donde menos se invierte y adonde trasladan aquello que dificulta el buen funcionamiento del sistema», dice el delegado del sindicato, Manuel Nieto. El médico pronostica que la lista de espera seguirá creciendo.
Y ya ha ha aumentado en los últimos tiempos. En marzo del 2013, cada ciudadano esperaba una media 56 días por una resonancia. Medio año después, se había situado en cuatro meses. Actualmente está en 69 días, mejor que en Santiago y A Coruña (ver tabla). Pero todavía hay 1.869 personas que esperan una resonancia en la ciudad. En Pontevedra son 541 y el tiempo de demora es de 33 días.
En Vigo, la resonancia magnética es una especialidad peculiar. Trabaja en el Hospital Xeral, pero que funciona al margen del resto del Chuvi. Es un servicio compuesto por radiólogos, pero no está inscrito en el servicio de Radiología y, por tanto, no hace otras pruebas como ecografías o tac. Está adscrita a la empresa pública Galaria y cobra al Complejo Hospitalario Universitario de Vigo por las resonancias que hace dentro de sus instalaciones. La integración en el Chuvi lleva años en el capítulo de las promesas incumplidas.