Particulares y pequeñas bodegas comienzan la vendimia

Susana Luaña Louzao
s. luaña VILAGARCÍA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Más de 100 usuarios de Amigos de Galicia recogen uvas en O Salnés

23 sep 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay prisa por llevar la uva a la bodega y evitar así que las inclemencias de un año que se le puso en contra sigan perjudicando al más preciado fruto de O Salnés. Pero aunque hay ganas de vendimiar, no todas las bodegas harán lo mismo. Las cooperativas y las de mayor tamaño todavía esperarán unos días más, sin embargo, las más pequeñas comenzaron ayer a recoger la uva.

Las primeras labores de recogida en O Salnés deberían haber empezado la semana pasada, pero las fuertes lluvias de los últimos días lo impidieron. El domingo, las condiciones climatológicas ya se pusieron a favor del sector, pero la uva estaba demasiado húmeda y lo conveniente es esperar unos días más para que seque, para que no esté demasiado ácida y no rebaje la calidad de una producción que no será tan buena como otros años, debido, precisamente, a que el tiempo no se alió en esta ocasión con las Rías Baixas. La excesiva humedad y las altas temperaturas de los últimos días no hicieron más que jugar en contra de un sector que ya tuvo que lidiar toda la temporada con las malas condiciones climatológicas.

Para los próximos días se esperan temperaturas cercanas a los 30 grados hacia el fin de semana y ausencia de lluvias: unas condiciones óptimas para una campaña que supondrá un dinero extra para los miles de vendimiadores.

Previsiones

Todas esas circunstancias en contra obligaron a rebajar las optimistas previsiones iniciales. No será una de las mejores cosechas de la denominación de origen; aún así, se espera alcanzar los 25 millones de kilos de uva en las 178 bodegas de Rías Baixas, con una facturación en torno a los 150 millones de euros. Entre empresarios, particulares, socios de cooperativas y peones, la vendimia moverá en torno a 6.700 personas.

La campaña supone un alivio económico para quien ya hace tiempo que no ve entrar de golpe 500 euros en su casa. Porque como mucho, eso será lo que cada peón se llevará este año por la vendimia. Para quien no tiene nada es mucho. Permite comprar ropa, pagar los libros de los niños o hacer frente a facturas retrasadas. Por eso las bodegas de la comarca llevan unos años atendiendo con especial sensibilidad la solicitud de las familias más necesitadas y así, son varias las que colaboran con la fundación Amigos de Galicia en la contratación de peones para la vendimia.

Este año serán en torno a 110 usuarios los que acudan a la vendimia en O Salnés, aunque Amigos de Galicia también ofrece peones en O Rosal y en O Ribeiro. Son, mayoritariamente, mujeres con hijos que sufragan así el elevado coste del inicio del curso. Pero no solo, también hay jóvenes. Los hubo siempre, y antes se pagaban sus caprichos con las ganancias. Ahora, en cambio, ayudan a sus familias.