Políticos de su puño y letra: así son y así toman sus decisiones

María Conde PONTEVEDRA / LA VOZ

PONTEVEDRA

Una perito pontevedresa analiza la escritura de Lores, Louro y Moreira

17 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Para sus defensores es una ciencia, una rama de la psicología que puede ofrecer un análisis certero de la personalidad de un individuo a través de su escritura. Para sus detractores, una «pseudociencia», cuyo carácter empírico no está suficientemente acreditado. Pero si somos lo que decimos y también lo que comemos, ¿Por qué no lo que escribimos? La grafología y el peritaje caligráfico son conceptos que están de plena actualidad -no hay más que ver las vueltas que da el caso de las cuentas anotadas por Bárcenas-, a pesar de que cada vez es más difícil ver un texto escrito de puño y letra.

A la grafóloga y perito pontevedresa María Gandásegui le hemos propuesto el reto de sacar un perfil a los portavoces de los tres grupos municipales a través de sus escritos personales y no de sus programas electorales. Con este fin, a Miguel Anxo Fernández Lores, Antón Louro y Jacobo Moreira les pedimos el material que se presume para un buen informe grafológico: un texto de quince líneas sobre un folio en blanco, rubricado con su firma. Esta es clave, dicen, ya que en un escrito, el texto proporciona la información sobre la personalidad más social, mientras que la firma nos habla del yo más profundo; es el sello de la personalidad.

Como dice Gandásegui, «no hay dos personas iguales, por tanto no hay dos escrituras iguales». Esta experta grafóloga, que ha participado como perito en diversos procesos judiciales, incluidos la identificación de anónimos, destaca que «lo mismo que los psicólogos utilizan el test de la familia, de la casa, que son dibujos, la escritura es también una proyección de la personalidad». «Dependiendo de a dónde se dirige la proyección de los trazos estás diciendo una cosa u otra -señala-. Se trata de analizar el conjunto, verlo y fijarte en los detalles, y vas sacando todo de una persona, su comportamiento, su carácter... Puedes averiguar estados de ánimo, si es optimista, orgulloso...». En sus archivos, ella guarda más de 1.000 papeles de escritos de toda índole, hasta notas del súper, que disfruta analizando. Incluso se autoexamina: «Yo también me veo los defectos».