Una treintena de perros deambulan abandonados por las calles de Ribadumia

La Voz LA VOZ | VILAGARCÍA

PONTEVEDRA

08 jul 2007 . Actualizado a las 07:00 h.

El problema que los voluntarios de Protección Civil de Ribadumia tienen con los perros abandonados no es nada nuevo, pero al llegar el verano se acrecienta, y la agrupación ya no sabe qué hacer con los animales, al carecer de unas instalaciones adecuadas para acogerlos. El presidente de la agrupación, Andrés Otero, hizo una llamada de atención a los que abandonan los animales. «Non pode ser que todos os anos pase o mesmo ao chegar o verán», subrayó. En la actualidad la agrupación tiene en su sede cuatro perros recogidos en la calle; el último, en la mañana de ayer. «É un animal moi manso -explica Andrés Otero-, pero andaba meténdose nos comercios e nos supermercados e claro, molestan, e a xente chama para que os recollamos». Pero la agrupación tampoco tiene espacio para acogerlos a todos. Calculan que estos días deambulan por las calles de Ribadumia una treintena de animales abandonados, sobre todo en Barrantes. Y mientras no esté construida la perrera comarcal, son los voluntarios los que, a falta de un servicio que se ocupe de los animales, acaban haciéndose cargo de los perros. Lo habitual es que acaben encontrándoles una familia de adopción. Ayer mismo estaba previsto que fuese un vecino a ver los perros que había en la sede para quedarse con uno de ellos. Pero la agrupación denuncia que tampoco es ese su cometido, y que si se encargan de los animales es por no verlos sueltos en las calles causando molestias a los vecinos. Cuando no tenían espacio para ellos, incluso en alguna ocasión se vio obligado el presidente a llevar algún perro a su casa a la espera de encontrarle un nuevo hogar. Las gestiones para la construcción de una perrera mancomunada empezaron desde hace años, pero de momento no hay instalaciones.