Ni la petición de disculpas ni la presentación de medidas materiales y legislativas para luchar contra la corrupción consiguen frenar el acoso parlamentario de la oposición a Rajoy para que dé explicaciones en el Congreso y asuma responsabilidades por los casos que afectan a su partido. El portavoz parlamentario del PSOE, Antonio Hernando, mantuvo ayer el tono duro contra el presidente y afirmó que Rajoy «ha decidido que la huida y el silencio es la única respuesta del PP y del Gobierno frente a la corrupción». Y por eso, según afirmó, los populares se están «despeñando por la corrupción». «Nadie va a creer al PP cuando presente ninguna medida si no asume primero responsabilidades y da las suficientes explicaciones», señaló Hernando.
La oposición en pleno quiere un pleno monográfico sobre corrupción y no va a ceder. El portavoz de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), José Centella, expresó su «vergüenza» por el «portazo» de Rajoy y se mostró convencido de que finalmente se verá obligado a comparecer, como ocurrió en el caso Bárcenas, cuando Rajoy compareció «a rastras». La misma expresión utilizó la líder de UPyD, Rosa Díez que dijo que, aunque al final el presidente dará explicaciones, se habrá perdido un tiempo «precioso» para luchar contra la corrupción y eso tendrá «un coste».
El portavoz de ERC, Alfred Bosch, advirtió de que su grupo promoverá la petición de que se cree una comisión de investigación sobre todos los casos de corrupción que han tenido lugar en «todo el Estado español» en los últimos años. «Una causa general contra las malas practicas», precisó.