Rafael Catalá anuncia que modificará la ley de tasas judiciales

EFE

ESPAÑA

SERGIO PEREZ | Reuters

El nuevo ministro de Justicia emprenderá el «análisis y la mejora» de esta polémica norma

29 sep 2014 . Actualizado a las 22:30 h.

El nuevo ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha anunciado este lunes que modificará la ley de tasas judiciales como una de sus primeras actuaciones al frente del departamento y ha señalado, sin hacer mención expresa a Cataluña, que su responsabilidad será defender siempre el «imperio de la ley».

En su discurso de toma de posesión en el Palacio de Parcent, Catalá ha señalado que retomará e impulsará las reformas pendientes del Ministerio «desde el diálogo y el consenso» para buscar un gran acuerdo en materia de Justicia. Como novedad, ha explicado que emprenderá el «análisis y la mejora» de la ley de tasas judiciales, que fue aprobada por las Cortes con el único apoyo del PP y que se encuentra recurrida ante el Tribunal Constitucional. Catalá ha hecho este anuncio ante la atenta mirada de su antecesor en el cargo Alberto Ruiz-Gallardón, a quien ha agradecido su trabajo en el Ministerio, que dirigió hasta el pasado martes, cuando dimitió tras la retirada de la reforma de la ley del aborto.

En el acto, Catalá ha estado acompañado de la ministra de Justicia en funciones y vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, de los ministros de Asuntos Exteriores, Defensa, Hacienda y Fomento, así como del presidente del Tribunal Supremo y Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y del fiscal general del Estado. Sobre la consulta catalana, aunque sin hacer mención expresa, ha asegurado que su responsabilidad como ministro será siempre defender el «Estado de derecho y democrático» que tiene entre sus principios fundamentales «el imperio de la ley».

En su primer discurso como titular de Justicia ha destacado la «intensa actividad legislativa» de su antecesor con «un amplio repertorio de propuestas -ha dicho-», si bien, ha precisado, «es el momento de fijar prioridades». La revisión de la justicia penal, la reforma de la ley de enjuiciamiento criminal, la mejora de la justicia gratuita, la implantación de un sistema ágil y eficaz en el Registro Civil así como la dotación de plazas de jueces y fiscales serán los primeros asuntos que atenderá el nuevo ministro.

También se ha comprometido «personalmente» a analizar nuevas vías para lograr la implantación de una administración electrónica de la Justicia, una demanda de la mayoría de las asociaciones profesionales. Catalá ha dicho que desempeñará todas estas tareas con «la mayor dedicación y lealtad» para tratar de responder a la expectativas de los ciudadanos y a la confianza que en él ha depositado el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Para ello ha tendido la mano a los juristas, expertos, asociaciones profesionales y colegios, a los que ha pedido su colaboración para afrontar «entre todos» los grandes retos que tiene ante sí la Justicia española.

«Seguro que desde el diálogo y la búsqueda del consenso y acuerdos comunes seremos capaces de alcanzar puntos de encuentro», ha dicho en alusión a la petición de las asociaciones de jueces y fiscales, que la pasada semana reclamaron a Catalá un gran pacto de Estado en materia de Justicia. Con su nombramiento, Catalá regresa a una casa en la que ya fue secretario de Estado entre el 2002 y el 2004 con José María Michavila como ministro, lo que conlleva para él, ha dicho, «no solo una responsabilidad extraordinaria sino una satisfacción personal». «Soy consiente de que asumo una tarea difícil e inacabada pero queda trabajo por hacer», ha concluido el ministro, que ha tomado posesión de su cargo tras prestar juramento a primera hora de la mañana en el Palacio de la Zarzuela ante el Rey, y asistir inmediatamente después al Consejo de Ministros extraordinario para deliberar sobre la presentación de los recursos ante el Tribunal Constitucional contra la ley de consultas catalana y la consulta del 9N.