Crisis de Gobierno a la vista

Colpisa

ESPAÑA

De Guindos, Wert, Cañete y Mato figuran en casi todas las quinielas sobre los relevos en el Ejecutivo

15 feb 2014 . Actualizado a las 21:05 h.

Conocer los planes de Mariano Rajoy es un privilegio al alcance de muy pocos. Un colaborador de los más allegados, para expresar sus dudas sobre cómo anticipar alguna decisión del presidente del Gobierno, subraya que hay decisiones que Rajoy no comparte ni con Soraya Sáenz de Santamaría, su mano derecha en el Ejecutivo. «Si quieres que algo no se sepa, ni siquiera lo pienses», comentó Rajoy en una de las escasas conversaciones que mantiene con periodistas.

Este sigilo ha obligado a sus colaboradores y analistas políticos a agudizar su capacidad para interpretar las contadísimas señales que el inquilino de la Moncloa detila con cuentagotas sobre sus intenciones. La decisión de Rajoy de apurar casi hasta el límite legal el anuncio del cabeza de lista del PP para las elecciones europeas alimenta los rumores de que su primera crisis de Gobierno está al caer. La designación del candidato europeo «no será antes del 6 de marzo», advirtió el martes el jefe del Ejecutivo desde la capital de Turquía. Comienza ahora el juego de las quinielas de ministrables.

Los italianos desde su vasta experiencia apodan a este juego el totoministri. Primero toca acertar con los miembros del Gabinete que se van. Rajoy se ha resistido como gato panza arriba a hacer relevos en su equipo. En enero, en su segunda entrevista en España desde que es presidente del Gobierno, defendió con vehemencia la labor de los miembros del Consejo de Ministros, pero sobre todo ensalzó a los más quemados, según las encuestas. Mostró su convicción de que podía aguantar todo el mandato sin mover ninguna de sus piezas. Y en efecto, durante su larga trayectoria política ha demostrado que le disgustan las innovaciones, sobre todo si se trata de personal de su confianza.

Rajoy cambiará el paso por diversos motivos. El principal, porque Miguel Arias Cañete quiere ser comisario europeo y para ello, aunque no es obligatorio, será el número uno de la lista para las elecciones del 25 de mayo. La crisis, según varios veteranos del PP, podría llegar en abril, justo antes de los comicios continentales y no se limitaría a un único cambio. Estos relevos darían un nuevo aire a un Gobierno muy desgastado por dos años plagados de malas noticias en forma de recortes, ajustes presupuestarios y subidas de impuestos. Ahora que según Rajoy lo peor ha pasado, llega el momento de dar satisfacciones a los cientos de miles de votantes del PP que, según los sondeos del CIS, han perdido la fe en su partido. Para ello, según los manuales, es necesario cesar a los ministros que más rechazo social despiertan, aunque en esta ocasión sería imposible cumplir a rajatabla con esta máxima porque ninguno de los miembros del Ejecutivo llega al cuatro de valoración en una escala del cero al diez.

Pistas y señales

Pero tal vez Rajoy vaya a contracorriente y mantenga a los menos populares. De hecho, defendió de manera expresa, durante su entrevista en Antena 3 a Cristóbal Montoro, Alberto Ruiz Gallardón y José Ignacio Wert, a los que agradeció su valentía en tiempos difíciles. El titular de Educación y Cultura barrunta su marcha y atribuyó a problemas de agenda su ausencia en los pasados Premios Goya, pero varios profesionales del mundo del cine aseguran que Wert les confesó que para el poco tiempo que le quedaba a frente del Ministerio no iba a aguantar más insultos o reproches públicos, como los que se vaticinaba que iba a recibir en esa gala.

Cañete no es el único miembro del Gabinete que quiere poner rumbo a Bruselas o Luxemburgo. Al ministro de Economía, Luis de Guindos, le gustaría presidir el Eurogrupo y hay indicios que apuntan a que tiene posibilidades. Por ejemplo, la decisión del Partido Popular Europeo de nombrarle coordinador de la comisión que analiza las decisiones del Eurogrupo y del Ecofin, un gesto que se antoja como un espaldarazo a su candidatura para dirigir a partir de noviembre a tiempo completo el máximo órgano de coordinación económica en la UE. Ana Mato es otra de las ministras señaladas a las que Rajoy ha respaldado en público, sobre todo tras conocerse que su familia recibió regalos de la trama Gürtel a través de su ya exmarido, Luis Sepúlveda. La designación de su número dos, Juan Manuel Moreno, como líder del PP de Andalucía abona la idea de su salida.

Alberto Ruiz Gallardón, uno de los ministros más sólidos y con mejor percha política del Ejecutivo, también roza zona peligrosa. Su anteproyecto de reforma de ley del aborto ha sido contestado hasta por barones regionales del PP. Gallardón intenta eludir la hoguera recalcando que se trata de una propuesta aprobada por todo el Consejo de Ministros, y no solo suya, y que, sobre todo, es una promesa electoral. Lo que se le discute en su propio partido es si la iniciativa llega en el momento político oportuno y con el consenso social necesario en una norma que despierta tantas sensibilidades.