Ángel Currás: «Yo soy inocente y confío en que todo se aclare»

m. cheda / x. melchor SANTIAGO / LA VOZ

ESPAÑA

El alcalde de Santiago habría indicado a Vendex qué personal tenía que contratar en una guardería

04 ene 2013 . Actualizado a las 13:04 h.

El alcalde de Santiago, Ángel Currás (PP), ha sido imputado por la jueza de Lugo que instruye la operación Pokémon y tendrá que declarar el día 17 a las 12 horas acusado de un delito de tráfico de influencias, como ayer adelantó La Voz de Galicia en su edición digital.

Junto al regidor compostelano también ha sido imputado su jefe de gabinete, Francisco Castro. De ambos se sospecha que habrían indicado a la adjudicataria de la guardería de Salgueiriños qué personal debía contratar. La empresa es Sermasa, que forma parte del grupo Vendex, sobre el que gira toda la trama de la Pokémon y que habría recibido un correo electrónico de la alcaldía con el listado de personas que tenían que trabajar en el centro educativo.

El regidor compostelano recibió la notificación a última hora de la mañana, en el Concello, y de manos de agentes de Vigilancia Aduanera. Tras hacerse pública la noticia, Currás convocó una rueda de prensa de urgencia en la que señaló que acudirá ante la magistrada Pilar de Lara Cifuentes «con la máxima tranquilidad».

En su comparecencia aseguró que no tiene intención de dimitir porque, afirmó, «yo soy inocente y confío en que todo se aclare, por lo que en mi ánimo no está una toma de decisión de esas características». «Estoy convencido de que no hay ninguna irregularidad», añadió.

El alcalde compostelano matizó que solo estaría dispuesto a poner el cargo a disposición de su partido si, tras su declaración, la jueza le impusiese medidas cautelares, como por ejemplo sería una libertad bajo fianza.

Antes del regidor ya se había visto implicada en el caso Pokémon la concejala de Educación santiaguesa, Rebeca Domínguez, que precisamente sustituyó a Currás al frente de ese departamento cuando este fue nombrado alcalde tras la dimisión forzada del anterior regidor. Gerardo Conde Roa se marchó tras ser acusado de un delito fiscal por no declarar el IVA de la venta de unas viviendas que construyó su promotora.

Una foto incómoda para Rajoy

La imputación de Currás se produjo en vísperas de la celebración en Santiago, hoy, de un acto al que acudirá el presidente del Gobierno. En principio también iba a hacerlo el regidor, pero esa convocatoria desapareció de su agenda tras trascender su situación procesal. ¿Por qué? Según fuentes no oficiales del PP, para ahorrarle a Rajoy «una foto incómoda» con la que para nada contaba hasta hace unas horas. Preguntado al respecto, el regidor, titubeante, no explicó ayer los motivos. «Vamos a ver, [...] si puedo, lógicamente, asistiré. Si no, supongo que entenderán que yo no pueda estar allí, no por ninguna razón».

Un grupo municipal dividido

Eso lo dijo el alcalde en una sala de prensa donde solamente lo arroparon 4 de los 12 concejales (sobre un total de 25) que el PP tiene en la capital gallega. La foto de ese instante ilustra la fractura no confesa de un grupo municipal dividido, básicamente, en dos bloques a raíz del modo en que Alberto Núñez Feijoo gestionó la primavera pasada la sucesión de Conde Roa, plegándose a la exigencia de este último de que fuera Currás quien lo relevara y no la número dos de la lista electoral, Paula Prado.