Rubalcaba avisa al Gobierno de que los resultados de las elecciones en Galicia no son un cheque en blanco

Efe

ESPAÑA

El líder socialista asegura que los gallegos no han votado a favor del recorte de las becas, de las pensiones o de las prestaciones por desempleo

23 oct 2012 . Actualizado a las 22:06 h.

Alfredo Pérez Rubalcaba, líder del PSOE, ha confiado en que los resultados electorales en Galicia, donde el PP ha reforzado su mayoría absoluta, no sirvan al Gobierno para creer que tiene un cheque en blanco de la ciudadanía para seguir haciendo recortes. Han sido las primeras palabras de Rubalcaba sobre las elecciones autonómicas del pasado domingo, en las que los socialistas han sido castigados por las urnas, y las ha pronunciado en la tribuna del Congreso, durante el debate de las enmiendas a la totalidad de los presupuestos generales del Estado para el 2013.

El líder socialista ha prometido que responderá a la prensa en una conferencia informativa, después de mantener silencio a su llegada al hemiciclo, pero no ha eludido el tema cuando el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, lo ha sacado a relucir. En la contrarréplica, Montoro ha subrayado que los ciudadanos «no dan un cheque en blanco, dan una cuota de confianza», y ha incidido en que el fracaso electoral del PSOE «tiene mucho que ver» con la postura política de Rubalcaba de oponerse a las reformas.

Rubalcaba ha contestado que esperaba que el Ejecutivo no se tomara los resultados gallegos como un cheque en blanco para seguir haciendo recortes y ha advertido a Montoro de que los presupuestos eran una chapuza antes del 21-O y no se han convertido «en una cosa magnífica» tras ganar en Galicia. «Siguen siendo una chapuza después de las elecciones», ha apostillado.

Durante su primera intervención, el líder del PSOE se ha limitado a defender la petición de devolución de las cuentas públicas al Gobierno hasta en tres ocasiones, pero en la réplica no ha eludido el 21-O e incluso ha entrado en el cuerpo a cuerpo con Montoro, lo que ha sido agradecido por los diputados socialistas con fuertes aplausos.

Montoro había comenzado su discurso con un «quo vadis, señor Rubalcaba», para decirle a continuación que, tras la derrota en las urnas, esperaba de él un «discurso de altura, no uno económico de cuarta regional». También le ha dicho que su intervención le ha «desconcertado», porque le parece increíble que, habiendo sido lo que ha sido en el Gobierno socialista de España y habiendo dejado la herencia que ha dejado, venga a hacer un «discurso económico de cuarta regional».

En un tono mucho más duro que en su primera intervención, y visiblemente enfadado, Rubalcaba ha confesado que le ponía «enfermo» escuchar a Montoro hablar de responsabilidad, para subrayar después que su discurso era el mismo que habían hechos sus compañeros gallegos en la campaña electoral. Tras hacer hincapié en que los gallegos no han votado a favor del recorte de las becas, de las pensiones o de las prestaciones por desempleo, Rubalcaba ha dicho que le preocupa «muchísimo» que el Gobierno lo vea «como un cheque en blanco para seguir recortando y llevando sufrimiento a las familias».

«Me encantaría que además de saber de economía tuviera usted sensibilidad social y no la veo por ningún lado», ha señalado al ministro. Después, le ha preguntado en varias ocasiones si el Ejecutivo va a revalorizar las pensiones con arreglo al IPC, algo a lo que Montoro no ha respondido, y también le ha pedido que defienda en Bruselas que la ayuda para los bancos no compute como deuda.

A este respecto, ha calificado de «inexplicable y éticamente inadmisible e inmoral» que haya 40.000 millones para los bancos y que el Gobierno no tenga, por ejemplo, un plan de empleo. Rubalcaba ha concluido diciendo que «el problema ya es de herederos, no de herencia», porque los trabajadores afectados por la reforma laboral, el copago farmacéutico o el recorte de las becas «no tienen nada que ver con la herencia recibida». «Son la herencia de su Gobierno, la del señor Rajoy, que bien podía estar en esta Cámara escuchando este debate», ha señalado.

El presidente de la Cámara baja, Jesús Posada, le ha aclarado que Mariano Rajoy se encontraba en la sesión de control en el Senado junto a otros miembros del Gobierno. Justo en ese momento, ha hecho acto de presencia el jefe del Ejecutivo, entre los aplausos de la bancada popular y los comentarios de desaprobación de los diputados socialistas.

Pese a la aparición de Rajoy, ha pedido la palabra la portavoz del PSOE, Soraya Rodríguez, que ha acusado al presidente del Gobierno de haber utilizado el Senado como «coartada perfecta» para no estar en el Congreso durante el debate de presupuestos. Le ha contestado el portavoz adjunto del PP, José Antonio Bermúdez de Castro, que ha afeado al PSOE su «incoherencia» por decir que Rajoy no acude al Parlamento y, al mismo, criticarle cuando comparece en el Senado.