Los magrebíes de Xinzo estrenan el Ramadán en familia

sindo martínez OURENSE

XINZO DE LIMIA

Más de doscientos integrantes de la comunidad iniciaron el mes de ayuno diurno de 17 horas y oración 5 veces al día

08 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Treinta días de oración y ayuno comenzaron en la madrugada de ayer para millones de musulmanes de todo el mundo y para más de 220 vecinos de Xinzo de Limia.

Hasta el 6 de julio la coincidencia del noveno mes lunar al acabar el llamado Sha?ban -octavo mes en el calendario lunar islámico- marca el comienzo del mes sagrado musulmán. Las reglas son claras. Se trata de que el creyente aprenda paciencia, humildad y meditación. El ayuno diario desde antes del alba hasta la puesta del sol, tomando la primera comida al acercarse la oración del anochecer es un precepto ineludible salvo para mayores o niños pequeños.

Tras la primera oración antes de la salidad del sol, los musulmanes realizan un plegaria ritual, entonces se reparten dulces, comida y bebidas sin alcohol en las mezquitas y en las casas. Están prohibidas las relaciones sexuales en ese lapso de tiempo entre las 04.45 hasta las 22.15 horas. Xinzo es, tras la capital ourensana -que cuenta con unos 500 musulmanes-, la comunidad magrebí más importante de la provincia.

Uno de los líderes de la comunidad musulmana de A Limia, Morat Lajouad, presidente de la asociación Al Wafa, destaca: «Es un ayuno que preparamos durante los meses previos y el cuerpo se va habituando a no alimentarse durante el día».

La mezquita y los domicilios  particulares es donde se centra la festividad religiosa sagrada del mundo musulmán. «El Ramadán es uno de los pilares del mundo musulmán y todo buen creyente debe respetarlo. Son cinco rezos diarios en la mezquita», según Lajouad.

Respeto

Este veterano limiano -lleva viviendo en Xinzo desde hace más de un cuarto de siglo- recuerda: «Las cosas han cambiado, antes no se respetaba tanto el rito del Ramadán por parte de alguna gente de A Limia como ahora. Las nuevas tecnologías han ayudado a entender a la gente de aquí la importancia de este mes para nosotros». El ayuno es seguido por la población desde la adolescencia y tiene un carácter marcadamente familiar. El momento cumbre de la jornada del Ramadán es la oración de la caída de la tarde, poco antes de poder empezar a comer tras el ayuno de diecisiete horas.

El mes del Ramadán es uno de los ejes del ejercicio religioso musulmán, pero también hay otros, como la obligada visita a la Meca una vez en la vida. En el caso de Lajouad, expuso que él ya lo hizo hace tiempo. «La recomendación es que se haga una vez que seas joven y que puedas permitírtelo económicamente, yo así lo viví en su momento. Ir allí es algo incomparable para un musulmán», resume el líder magrebí limiano.