Unos 1.400 aparatos pasarán una revisión que vale 100 euros
05 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Un nuevo quebradero de cabeza sacude estos días a los agricultores de A Limia. La aplicación efectiva de una directiva de la Unión Europea obligará a 1.404 sulfatadoras agrícolas ourensanas, la mitad de ellas antelanas, a pasar una rigurosa inspección técnica de productos fitosanitarios antes del 26 de noviembre.
El Registro Oficial de Maquinaria Agrícola (Roma) define estas cifras de sulfatadoras que están contabilizadas. La nueva normativa se centrará en todos los elementos clave de los aparatos: nebulizadores, espolvoreadores, pulverizadores neumáticos, pulverizadores hidroneumáticos y pulverizadores hidráulicos. El problema radica en que muchas sulfatadoras viejas pueden no superar una inspección que en principio se anuncia como bastante estricta. Cada aparato puede llegar a costar más de 20.000 euros, dependiendo de la marca y de la capacidad, aunque los más pequeños no llegan a esos precios; y cada revisión costará cien euros.
A día de hoy las inspecciones solo se pueden pasar en Bergondo (A Coruña) y en Pontevedra. Habrá desplazamientos de ITV móviles. Los agricultores deberán unirse en grupos de 8 para concertar que una unidad se desplace hasta A Limia a pasar esa inspección en fechas aún por determinar.
Un labrador antelano, Amado Díaz Penín valoró: «Esto es un auténtico engorro y una complicación más para el sector y una manera más de recaudar dinero que perjudica al agricultor». Si el aparato no pasa la primera ITV tendrá una segunda ocasión de superarla, tras la corrección de los elementos defectuosos, pero si de nuevo es rechazada, deberá desplazarse hasta Pontevedra para intentar lograr la validación. «Dudo que algunas sulfatadoras agrícolas viejas pasen esa revisión por lo que quedarán inutilizables», añadía Penín. Este labrador no descartó que algunos agricultores deban comprar un aparato nuevo en algunos casos.
Los agricultores se quejan también de falta de información sobre esta cuestión. Un representante de una de las dos empresas que realizan estas ITV dio una charla en Xinzo para explicar el proceso. Más de un afectado se quedó atónito ante la complejidad de la revisión y el complicado trámite para pasarla en A Limia. La ITV tendrá una vigencia de 5 años para maquinaria nueva.
En total, los cálculos son sencillos. La ITV le costará al menos 74.000 euros a los labradores antelanos, 140.000 a los ourensanos, y casi un millón de euros a todos los gallegos. Eso si las máquinas superan la inspección, si no los costes serán más elevados.
Por provincias, hay 1.404 sulfatadoras en Ourense, 3.379 en Pontevedra, 2.404 en Lugo y 2.594 en A Coruña.
Cursos de manipulador
La ITV no es el único problema para el uso de fitosanitarios en las fincas. La nueva normativa obliga también a que los agricultores superen un curso específico de 25 horas para manipular estos elementos químicos. Ahora mismo hay una lista de espera en la Oficina Agraria Comercal de Xinzo de 600 agricultores.
Si no se dispone de ese nuevo carné, el agricultor no puede comprar herbicidas o plaguicidas. Docenas de labradores antelanos acudieron a León durante los pasados meses a sacar el curso, pero ahora hay serias dudas sobre si el mismo sea homologable en Galicia. Una vez superado ese curso, un sencillo examen habilita durante 10 años para ser manipulador de fitosanitarios.
El curso tiene tres niveles, uno de para agricultores, otro para los vendedores de estas sustancias y otros más específicos de fumigador para los que manejen productos químicos peligrosos o especialmente tóxicos.