La crisis aleja de Xinzo a un tercio de los extranjeros

SINDO MARTÍNEZ XINZO / LA VOZ

XINZO DE LIMIA

El retorno y la nacionalización de magrebíes son algunas causas de la fuerte caída del número de residentes foráneos

17 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El número de extranjeros residentes en el municipio de Xinzo de Limia cayó en poco más de un lustro cerca de un 30 %, según datos del Instituto Galego de Estadística. A finales del año 2008, el momento de mayor presencia de inmigrantes en el municipio, se contabilizaban 776 ciudadanos nacidos fuera de España, pertenecientes a más de una veintena de nacionalidades -en su mayoría magrebíes-. En la actualidad, esa cifra ha caído en 202 personas, hasta las 574.

Una de las causas de este descenso es el retorno de emigrantes del Magreb a sus países en los últimos años. La razón hay que buscarla en la crisis económica en España, lo que ha redundado en la caída del negocio de la venta ambulante, principal sector económico del que vive este colectivo. Hace poco más de seis años había en Xinzo cerca de 340 vecinos de origen magrebí, casi la mitad de los residentes en la provincia en aquel momento. Hoy rondan los 250. Otro de los motivos del descenso en la población inmigrante es que muchos se ha nacionalizado tras llevar tiempo viviendo en A Limia. Xosé Losada, técnico del Ayuntamiento para la atención al colectivo, confirma que son muchos los que decidieron irse. Pero incide también en la otra explicación: «Hai moitas destas persoas que xa non figuran oficialmente nas estatísticas como estranxeiros porque se nacionalizaron. Moitos deles levan dez ou quince anos vivindo aquí».

«El colectivo magrebí tiene una presencia importante en la vida de Xinzo, pero queremos que se sientan más limianos y que los limianos los acepten mejor», destaca el concejal de Servicios Sociales, Manuel Cabas, que asegura que están colaborando con el objetivo de orientarles mejor e incentivar iniciativas culturales y deportivas.

«El colectivo debe contar con una mezquita propia aquí»

Imed Erraihani es uno de los integrantes de la asociación El Wafa, recientemente renovada tras una actividad de más de una década de actividad en Xinzo de Limia. Este joven, de 24 años, que habla perfectamente árabe, castellano y gallego, tras pasar 15 años en la villa antelana, se muestra convencido de que hay que avanzar en la interrelación entre los inmigrantes de origen magrebí y los limianos y que el Ayuntamiento debe hacer un esfuerzo adicional de atención a este colectivo.

?¿Cuál fue la causa de que bastantes marroquíes se fueran de Xinzo?

?Mucha gente tuvo que irse porque la crisis hizo mucho daño a la venta ambulante y hundió a muchos que ya no tenían dinero para vivir aquí. Antes con esa actividad se ganaba algún dinero, pero eso ya se acabó. Algunos volvieron a Marruecos y otros fueron a Ourense o a otros sitios a buscar una vida mejor y otras oportunidades.

?¿Cuántos quedan aquí ahora?

?Hay más de 200 magrebíes en Xinzo. Somos un colectivo importante y creemos que merecemos algo más de atención y ayuda del Ayuntamiento, aunque es verdad que al menos escuchan nuestras peticiones y eso es algo que valoramos.

?¿Qué demandas tienen?

?El colectivo debe contar con una mezquita propia. En la actualidad tenemos un pequeño local alquilado, que nos cuesta 250 euros al mes. Contar con un local más amplio es muy importante para nuestro colectivo y por eso nos gustaría que el Ayuntamiento nos cediera uno.

?¿Qué otras actividades precisarían de apoyo del Concello?

?Yo soy deportista y pienso que el Concello podría ayudar más en actividades e iniciativas para nuestra juventud, tanto en temas deportivos como culturales. Creo que aún hay mucho que hacer por la integración de los magrebíes en Xinzo y en esa tarea nos esforzamos desde la asociación. Respetamos mucho a la gente adulta de nuestro colectivo, pero también creemos que hay que prestar atención a los problemas de los jóvenes.