«Vender fuera no es tan fácil como parece, hay que conocer bien el mercado»

m. v. ourense / la voz

SAN CIBRAO DAS VIÑAS

Rodríguez López Auto quiere centrarse a corto y medio plazo en las ventas en Perú y los países de su entorno

22 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La empresa ourensana Rodríguez López Auto -un negocio creado en los años noventa del siglo pasado en el polígono industrial de San Cibrao das Viñas y dedicado a la fabricación de vehículos especiales como ambulancias o coches policiales- empezó a ver la necesidad de exportar sus productos hace unos cuatro años, cuando comenzaron a sentirse los efectos de la crisis económica en España. Entonces sus responsables se dieron cuenta de que si querían mantener los puestos de trabajo debían ir más allá. «Nos pusimos las pilas para ver cómo era el mercado exterior, para tratar de ver en qué países podíamos colocar nuestros productos, empezamos a viajar», recuerda ahora José Enrique Rodríguez López, fundador de la empresa -en cuya dirección ya le acompaña su hijo- que reconoce que está siendo ahora «cuando estamos empezando a recoger los frutos de todo aquel esfuerzo».

En ventas, eso se traduce en que tienen clientes en países como Inglaterra y Francia. De hecho, cada mes fabrican treinta ambulancias para el país vecino, al que también envían algunos coches policiales. Pero no se conforman con eso. Sus gestiones les han valido incluso contratos con países como Angola. «El problema fundamental que uno se encuentra a la hora de vender fuera de su país es el de dar con una persona que de verdad quiera comprar, porque en el mercado exterior hay mucha confusión y también bastante engaño», reconoce José Enrique. Asegura que lo más difícil es conocer bien el mercado, «saber quienes son las personas adecuadas porque hay mucha gente que te pone trabas para que no entres, ya que si lo haces les puedes quitar a ellos su mercado. No es tan fácil como parece».

Pese a todos esos obstáculos, esta empresa local en la que trabajan 146 personas, no se plantea abandonar la senda de la exportación y, de hecho, están buscando nuevos países a los que llevar sus vehículos. La intención es centrarse en América Latina, donde no existen problemas con el idioma, y concretamente en Perú, «porque desde allí podemos saltar a los países del entorno, con los que ellos tienen convenios».

«Las empresas o se quedan paradas o crecen, el mercado nacional se satura y estamos obligados a buscar nuevos compradores. Tenemos que fabricar ambulancias todos los días», admite.