¿A quién compete la igualdad?

ourense / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

El Concello de Ourense defiende la concesión del premio Clara Campoamor al fiscal Julian Pardinas, mientras colectivos feministas insisten en que debe retirarse

25 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Se acerca el Día Internacional de la Mujer y entre las citas vinculadas a la celebración en la capital ourensana, está la entrega del Premio Clara Campoamor, otorgado por el Concello de Ourense. El reconocimiento llega este año marcado por la polémica por ser su destinatario un varón: el fiscal Julián Pardinas. La designación fue protestada por el movimiento de la Marcha Mundial das Mulleres, que pidió la retirada del nombramiento por entender que se premia a un representante del sistema judicial de protección a las víctimas en un momento en el que la actualidad refleja fallos clamorosos del mismo, con asesinatos de mujeres que tenían órdenes de protección; y acusa al PP de desvirtuar el espíritu de este premio. A entender del colectivo el reconocimiento fue creado para visibilizar socialmente a mujeres o colectivos de mujeres y recriminan que habiendo tres candidatas se optase por el único hombre.

La petición de la anulación del fallo del jurado fue secundada por Ourense en Común, que además de refrendar el argumentario de la Marcha Mundial das Mulleres añadía que era la primera vez que lo recibiría un hombre. Dato que, por cierto, no es correcto, ya que en 2009 lo recogía el ginecólogo José Luis Doval, del Centro de Orientación Familiar, y en 2007 Jaime Parra, juez de Violencia Doméstica.

La concejala de Igualdade, Sofía Godoy, salía al paso ayer reivindicando el compromiso y la labor de Pardinas y tildando las críticas de «un intento de politización» de un premio que, a su juicio, no debe discriminar entre las mujeres y los hombres que luchan por la igualdad.

La opinión sobre la polémica difiere también entre las otras candidatas al premio. María José Fernández, delegada para la Violencia de Género en la Subdelegación del Gobierno, cree que el premio es para cualquier persona, sea hombre o mujer, y opina que darlo a un varón «incluso es un valor añadido por lo que supone de reconocer la implicación de los hombres, que también es necesaria para erradicar el problema». Sonia Albor, de la Marcha Mundial das Mulleres, respalda el argumentario de su colectivo. «É necesario reservar estes espazos para a visibilización das mulleres», dice matizando que la crítica «non trata de desmerecer o traballo deste fiscal».

El galardonado

Por su parte, Julián Pardinas no quiso entrar a valorar la polémica. «Nada que decir», señaló con respecto a las críticas, pero agradeció el premio, que valora como un reconocimiento al trabajo de todo el equipo de la fiscalía, donde el ejerce como coordinador en esta materia. «Mientras haya víctimas, nadie puede estar satisfecho», abundó. Instó a las mujeres a que denuncien y cooperen con el Ministerio Fiscal hasta el final de los procedimientos. «Son imprescindibles como elemento de prueba», subrayó.