El cáncer de pulmón sigue siendo el proceso tumoral de peor pronóstico y Ourense se mantiene en una incidencia similar al resto de España. Esta patología centró la segunda mesa de las jornadas que se están desarrollando sobre patología respiratoria, en las que el oncólogo del CHUO José Luis Fírvida explicó a los médicos de Primaria los avances en los tratamientos.
-¿Ha habido muchos cambios en el tratamiento de este cáncer?
-En el tratamiento del cáncer de pulmón ha cambiado todo en una década. Se ha conseguido un vuelco espectacular tanto en cuanto a los diagnósticos como en los tratamientos. Lo más importante para lograr los resultados que se están consiguiendo es hacer ya desde el inicio un diagnóstico muy preciso y muy completo, con una buena biopsia e incluso con la denominada biopsia líquida. Es necesario analizar todos los posibles genes implicados en su inicio, determinadas alteraciones moleculares y mutaciones que nos permitan actuar con terapias diana.
-¿Y disponen los neumólogos y oncólogos ourensanos de las herramientas para hacer esos diagnósticos?
-Sí. Tanto aquí como a nivel de la comunidad gallega estamos con todas las armas disponibles para poder realizar el diagnóstico de esas alteraciones moleculares más frecuentes a día de hoy.
-¿Por qué es tan importante?
-Porque se sabe que hasta en el 50 % de los cánceres de pulmón puede existir alguna alteración molecular, alguna mutación, que es susceptible de ser tratada con determinados fármacos que son la base de la medicina de precisión o personalizada que nos permite fijar el mejor tratamiento para cada paciente. Son medicamentos excelentemente bien tolerados y que se administran por vía oral, no la quimioterapia clásica.
-¿Qué ventajas tienen?
-Estos medicamentos No tienen la toxicidad de la quimioterapia clásica, ofrecen excelentes respuestas clínicas y mejora la calidad de vida del paciente. En el pronóstico de estadio 4, cuando existe metástasis, veníamos hablando de una supervivencia de 8 o 10 meses. La terapia dirigida consigue triplicar o cuatriplicar la supervivencia clásica.
-¿El hecho de que haya alteraciones moleculares quiere decir que la posibilidad de desarrollar el tumor la tenemos en nuestros genes y no depende de hábitos?
-No, de ninguna manera. Estas alteraciones no son de nacimiento sino adquiridas y aparecen en el 15 % de los casos, frecuentemente en no fumadores; pero el tabaco está implicado en el 90% de los cánceres de pulmón así que la clave para acabar con esta enfermedad es dejar de fumar.
-¿La terapia dirigida es lo más novedoso hoy en día?
-Sí, junto con la inmunoterapia que es el gran bum desde hace dos o tres años. Ese tratamiento está diseñado para ayudar al sistema inmunitario a combatir el tumor. En cáncer de pulmón existen dos puntos de control, en sistema inmune que están muy estudiados y que están dando muy buen resultado. A día de hoy llevamos administrados bastantes tratamientos en nuestro equipo de oncología y con unos resultados muy esperanzadores.