Medio centenar de ourensanos disfrutan de los huertos urbanos municipales

Cándida Andaluz Corujo
cándida andaluz OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

En la primera convocatoria se repartieron cuarenta. Se abrirá una nueva para los que todavía no se inscribieron

01 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

A mediados del 2010, el Concello de Ourense puso en marcha huertos municipales en Mariñamansa. Cuatro años después, el proyecto Come Ourense, líder europeo en estos espacios urbanos, permitió abrir un lugar similar en el parque de Montealegre. En total, la ciudad cuenta con 72 parcelas que cada dos años se sortean entre los ourensanos que quieren utilizarlas para su uso personal. El objetivo: que la población adopte una actitud activa en la ocupación de su tiempo libre y de ocio, a la par que se enriquecen los valores saludables y medioambientales.

Este mes, 34 vecinos de la ciudad obtuvieron autorización para utilizar los huertos durante un nuevo período de dos años; otros diez todavía tendrán que presentar la documentación requerida. El resto de huertos vacantes serán de sorteados de nuevo en una futura convocatoria. Pero no será hasta enero cuando se entreguen las llaves a los adjudicatarios, aunque los que repiten ya pueden trabajar sus tierras. Es el caso de José Manuel Brea. Este prejubilado ourensano no tenía experiencia alguna cuando hace dos años decidió hacerse con los primeros huertos urbanos en Montealegre. «Teño acelgas, leitugas, porros, cebolletas, tomates, pementos e cabazas... Un pouco de todo para consumo persoal», afirma. Lleva tiempo trabajando la misma tierra y tuvo la suerte de poder elegirla de nuevo. Si alguien se le hubiera adelantado, todo su trabajo quedaría en nada. «Habendo máis hortos que xente no sorteo o normal sería que a nós, que levamos tempo na nosa terra, nos deran a oportunidade de seguir nela», afirma. La casualidad hizo que este año se enterara de la convocatoria: «Soubenno por un rapaz que tamén ten unha horta e que traballa no Concello». Dice que prefiere Montealegre por tratarse de un lugar alto.

Fernando González Trigás lleva varios años trabajando la huerta, aunque en esta ocasión ha cambiado de terreno, por la calidad de la tierra. Consume en su casa los productos que siembra y asegura que el hecho de subir hasta Montealegre es para él el sustituto del gimnasio, una manera relajante y dinámica para vivir el tiempo de ocio. «Y además tiene sus frutos», subraya.