La asistencia psicológica es aún testimonial en el deporte ourensano

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

Los técnicos lo verían oportuno y se encuentran con el muro presupuestario

23 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La psicología deportiva avanza a pasos agigantados en distintas modalidades y podemos encontrar a profesionales del ramo en distintos clubes de toda la geografía nacional, si bien en Ourense no ha tenido un calado importante, debido sobre todo a las limitaciones presupuestarias de los clubes.

Así lo explica una voz autorizada como la de Gonzalo García de Vitoria, entrenador jefe del Club Ourense Baloncesto: «Yo creo que será un paso importante en el mundo del deporte y, de hecho, hace unos años contamos en el COB con la ayuda de una especialista en coaching, para algunas situaciones puntuales. Hace años, los entrenadores nos ocupábamos de la preparación física o la fisioterapia y ahora es impensable no contar con esos profesionales y pronto pasará lo mismo con los psicólogos».

Las restricciones de las entidades deportivas en materia económica son el gran problema para el desarrollo de una planificación que incluya servicios psicológicos, los cuales son demandados como necesarios también en categorías de formación. Incluso desde las federaciones son promovidos, en algún caso por medio de charlas divulgativas, pero a sabiendas de que es complicado exigir a los equipos que dediquen parte de sus escasos recursos a esa faceta. Además de la avanzadilla cobista, el Barbadás contó en su primer plantel con un psicólogo, ahora al servicio del Ourense CF.

«Los entrenadores suelen ser receptivos»

Cristhian Fernández Otero (Ourense, 1988) ya ha realizado distintas incursiones en el deporte provincial, asesorando a distintos equipos.

«Hice un máster al terminar la carrera y realicé las prácticas en la UD Barbadás, que al año siguiente decidió contratarme. Por esa época también colaboré con el Pabellón de la LF2 de baloncesto y, desde el pasado mayo, me comprometí con el Ourense CF», relata el propio psicólogo, quien destaca el hecho de que en Os Carrís se centraba en la primera plantilla y, de vez en cuando, también ayudaba en la base, al contrario de lo que sucede ahora en Oira, donde está volcado con las categorías inferiores, si bien arrima el hombro también en la escuadra de Preferente.

A la hora de definir su trabajo, Cristhian explica a modo de resumen: «Voy a ver a los chavales como entrenan, pero actúo sobre todo por medio del entrenador. Tomo mis notas y les transmito una serie de pautas sobre su trabajo, aunque está claro que no existe ninguna fórmula mágica».

Sí tiene Fernández Otero un alto concepto de los técnicos que se encargan de dirigir a deportistas: «En la mayoría de las ocasiones los entrenadores suelen ser receptivos conmigo, en especial en la base yo considero fundamental la asistencia psicológica y la gran mayoría de los monitores que he encontrado también creen en la importancia de formar jugadores, pero también a personas».

El ourensano cree que la psicología ya es materia obligatoria en todos los clubes profesionales y asume que en el fútbol la situación se complica a partir de la Segunda B, pero «conozco a muchos compañeros que ya trabajan a ese nivel».