De la aristocracia a tocar la trompeta

CRISTINA MARQUINA, R. N. P. OURENSE

OURENSE CIUDAD

Antonio Cortés

José Collado, afincado en Ourense y supuesto sucesor del marqués de Larios, tocó con famosos

08 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La alegría de José Collado siempre ha sido tocar la trompeta. A los siete años se familiarizó con este instrumento en el colegio de la Misericordia en el sur de España. Aunque, por aquel entonces, él no lo supiera, la trompeta sería su aliada perfecta para superar los golpes de la vida. A los nueve meses fue abandonado por su madre en un centro de acogida. Con dos años lo mandaron a la Casa Cuna y, de ahí, al hogar de Nuestra Señora de la Victoria. Con 49 años sintió el impulso de conocer sus raíces y encontró a su madre gracias al programa Quién sabe donde de Paco Lobatón. Ella le confesó que su padre era Don José Antonio Larios Franco, de la dinastía Larios. A día de hoy, siguen en marcha las acciones legales y trámites para confirmarlo como el sucesor del IV marqués de Larios. «Solamente estoy pidiendo que se reconozca la verdad», afirma.

Mientras tanto, la vida de José, conocido como Pepe el Trompreta ha dado muchas vueltas. En esas estaba cuando hizo de la música su profesión. Ha sido en dos ocasiones campeón nacional solista de trompeta y también se alzó con el título a nivel Europeo.

«He tocado con Celia Cruz en La Tropicana de Cuba, con Mariah Carey, Raphael, Rocío Dúrcal y Rocío Jurado», enumera orgulloso. No duda en añadir que ha grabado discos con Cantores de Híspalis, Requiebros, Los Romeros de la Puebla, Los Marismeños y

Los del Río y tiene además su propio disco. No duda en afirmar que él interpreta cualquier estilo. «Lo mismo toco un son cubano que una guaracha, una salsa, jazz, blues, swing, country, música psicodélica, música underground, soul, rock and roll. Yo hago de todo porque llevo 61 años tocando la trompeta», explica.

José sabe la satisfacción que genera ser reconocido por su vocación. La trompeta ha sido una excelente compañera en su vida. Gracias a ella ha recibido grandes ovaciones. Tocó él solo los pasodobles en una plaza de toros de España, durante las cuatro horas que duró aquella corrida. El resultado de la faena, calurosos aplausos del público y una felicitación especial de Manuel Díaz «El Cordobés» para alabar la hazaña. Ha dado la vuelta al mundo en dos ocasiones mientras estaba de trompetista en un transatlántico. Recuerda con especial cariño las navidades pasadas en el buque cruzando mar abierta. Amenizó la velada de los pasajeros con las notas musicales de Blanca Navidad y Noche de Paz. Sus villancicos navideños le cosecharon la felicitación de Jimmy Carter, tal y como él mismo explica.

El día 8 de junio de 2010, aparecía en primera página del New York Times. El motivo de aquella entrevista no eran sus peripecias musicales sino su posible origen noble. Explica satisfecho que estuvo presente en una reunión de Julio Iglesias con Antonio Banderas y que el cantante le dijo al actor que, de los tres, Pepe el Trompeta era el más famoso por haber salido en exclusiva en la primera página de ese diario.

Ahora toca la trompeta por diversión y para los amigos, y dice que ha cambiado Marbella por Ourense huyendo un poquito de la prensa. La lista de famosos a los que ha conocido adquiere un volumen considerable. Curro Romero, Espartaco, Enrique Ponce, los hermanos Manzanares, los Paquirri, el conde Rudi y María Luisa de Prusia,entre muchos otros se incluyen en el repertorio. Ha estado en infinidad de orquestas, bandas y grupos, por lo elevado de la cantidad sorprende que recuerde con tanto detalle el año y nombre de cada una de las agrupaciones musicales.

«Tocando en Marbella en un restaurante italiano llamado Giuseppe, coincidí con Luciano Pavarotti. El cantante me pregunto qué canción íbamos a cantar. O sole mío, le respondí. A lo que él me pregunto: ¿Por qué no decimos o solomillo en lugar de o sole mío?», cuenta esta anécdota sin parar de reír.

Su vida bien podría dar para escribir una novela y filmar una película. De hecho, en eso están. El escritor Antonio García Pereyra es el encargado de escribir su vida y los entresijos de la casa Larios, en un libro lamado El Marqués de los ojos tristes, que espera esté publicado a finales de septiembre. El músico cuenta también que hay guionistas interesados en llevar su historia a la gran pantalla.