El puzle de la intermodal de Ourense está sin encajar a la espera de Fomento
OURENSE CIUDAD
El alcalde ve un acuerdo histórico y los socialistas lo califican de electoralista
21 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El visto bueno del Consello de la Xunta al convenio para la futura estación intermodal de Ourense dejó una certeza y varias incógnitas. El acuerdo del gobierno autonómico deja claro el compromiso económico para el traslado de la estación de autobuses desde el barrio de O Pino hasta las inmediaciones del Empalme y para la financiación de una buena parte del aparcamiento subterráneo previsto en la zona. Aunque el gobierno de Núñez Feijoo no puso ayer cifras sobre la mesa, fuentes de la Consellería de Infraestructuras deslizaron en más de una ocasión que esa partida rondaría los diez millones.
La aprobación por parte de la Xunta del convenio a cuatro bandas con Concello de Ourense, Fomento y ADIF, sin embargo, pocas más piezas encaja del puzle en que se ha convertido el proyecto intermodal ourensano.
El silencio del Ministerio de Fomento y ADIF sobre sus verdaderas intenciones para la terminal de la alta velocidad ourensana mantienen la incertidumbre. Hasta ahora, no hubo ningún pronunciamiento público de la ministra de Fomento -ahora en funciones-, Ana Pastor, más allá del compromiso de palabra de que será una estación que cubra las necesidades de Ourense. Descartado públicamente en varias ocasiones el proyecto de Foster, se baraja la posibilidad de que se renuncie a construir un edificio nuevo y se apueste por refundar el actual y transformarlo en una estación AVE, unida a la terminal de buses que, según los trabajos de la Xunta, se situará en las inmediaciones del centro de salud de A Ponte. Ese escenario lo dio ayer por hecho el gobierno autónomo. En el comunicado posterior al Consello da Xunta puso sobre la mesa las obligaciones que deberían de asumir el resto de administraciones. Entre las que le apuntó a ADIF incluyó: «Redactar os proxectos, executar e financiar as obras de adaptación da estación Empalme á alta velocidade e actuacións de mellora da permeabilidade da zona». Es decir, que a la Xunta le vale el edificio actual y se conforma que ADIF lo renueve para dar cabida a los trenes AVE. Los otros deberes que le pone al administrador ferroviario pasan por la financiación del 33 % de los gastos del párking subterráneo.
A la preocupación por la falta de noticias de Fomento y ADIF se suma a la incertidumbre política nacional, que puede ser otro escollo para el proyecto del AVE ourensano. Si se cumplen los plazos marcados por Feijoo y la presentación del proyecto se hace en julio sería, probablemente, con un gobierno en funciones y en un hipotético traspaso de poderes.
En clave política
El alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, considera que el visto bueno de la Xunta al convenio a cuatro para la estación ourensana es un momento «histórico» para la ciudad. El PSOE tiene un punto de vista totalmente distinto y acusa al regidor de renunciar a la intermodalidad: «É un anuncio electoralista que nunca sen chegará a levar a cabo». Creen, además, que es imposible lograr la intermodalidad real con «dous proxectos desconectados entre si».
La Xunta da por bueno que ADIF se limite a adaptar el edificio actual a la alta velocidad
La incertidumbre política nacional, otro escollo para el desarrollo del proyecto ourensano
El PSOE dice que el convenio del bus metropolitano es perjudicial para la ciudad
El grupo municipal socialista censuró ayer el acuerdo del convenio para la puesta en marcha del transporte metropolitano. Los socialistas acusan al alcalde de Ourense de «impoñer un convenio en connivencia coa Xunta, que deixaría de lado os intereses dos cidadáns de Ourense e do que nin tan sequera se informou e consensuou cos grupos políticos representados na corporación municipal, nin foi asunto de debate na mesa de mobilidade». Además, los socialistas consideran que debe de llevarse su aprobación a pleno, y no a través de la junta de gobierno, y consideran que el convenio tiene fines electoralistas: «A actuación do PP é totalmente irresponsable e repercutirá en que os cidadáns teñan que pagar cos seus impostos parte do servizo metropolitano».
El grupo de Ourense en Común también mostró su disconformidad con el gobierno municipal y criticó que no llevará el convenio a debate en la mesa de movilidad.