¿Cuándo revisamos lo del AVE en 2018?

Rubén Nóvoa CRÓNICA

OURENSE CIUDAD

03 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Soy consciente de que ahora no es el mejor momento. Que estamos en plena precampaña de unas elecciones en bucle que no sabemos a dónde nos llevarán. Sin embargo, es lo que tiene dejar las cosas para última hora, que al final estallan en el momento más inoportuno. Es lo que le ha sucedido al Ministerio de Fomento con la línea de alta velocidad. Nadie le puede negar a Ana Pastor su implicación en un proyecto al que le aparecieron enemigos desde todas las partes del Estado y que se ha mantenido contra viento y marea. Esto es tan cierto como que no creo que haya ni un solo técnico en Fomento ni ningún responsable en ADIF que mantenga, fuera de los micrófonos y de la opinión pública, que el AVE entre Galicia (y por tanto Ourense) y Madrid estará completamente operativo en el año 2018. Es materialmente imposible, por mucho que la ministra y Rajoy se esfuercen en repetirlo cada vez que pisan las obras de la alta velocidad. La revisión de esa cifra es una tarea pendiente de los políticos. La sociedad ya lo ha asumido. Voces expertas apuntan a que una fecha razonable apuntaría hacia el 2022. Eso, matizan, si todo va bien y no hay ningún contratiempo, ya sea técnico o político. Y es que no hace falta ser un ingeniero que se haya especializado en la línea entre Lubián y Ourense para darse cuenta de que si estamos a mediados del 2016 y todavía no se han ni licitado las obras del último tramo entre Taboadela y Ourense (17 kilómetros de una variante exterior compleja técnicamente) es imposible que la línea esté completada en apenas año y medio que queda para que el calendario pase página y llegue hasta 2019. No sería, además, la primera vez que se modifica esa fecha. Hay que recordar que todo esto empezó con el Plan Galicia, a raíz del accidente del Prestige, y la promesa del gobierno por aquel entonces de José María Aznar de que los trenes AVE cruzarían Galicia ya en el año 2010. Luego llegó 2012 y más tarde 2015. Tras pasar PSOE y PP por el gobierno la fecha se llevó hasta un 2018 que en su momento parecía razonable. Esperemos que la cuenta se detenga en el 2022.

Y como parece que los verdaderos trenes AVE tardarán en llegar en Ourense la clase política parece dispuesta a amenizar la espera con el eterno debate sobre la estación. Los argumentos van y vienen en función de quien gobierna en Madrid y en Santiago, pero a día de hoy la única realidad es que tenemos un concurso de maquetas que ganó Foster y que Fomento no asumirá y un compromiso de una ministra de que en abril -sí, ya sé que hoy es 3 de mayo- se presentaría en Ourense el proyecto de una verdadera intermodal acorde a las necesidades de la ciudad. Yo, hasta que lo vea...