El Concello ourensano abre negociaciones con la empresa de la basura por sus incumplimientos

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La empresa de mantenimiento de zonas verdes también está en el punto de mira

03 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Una auditoría contratada por el Concello de Ourense detectó decenas de incumplimientos en las condiciones previstas para la prestación del servicio de recogida de basura. El nuevo gobierno municipal de la capital ourensana piensa abordar este asunto y ya ha convocado una mesa de negociación con la empresa adjudicataria. El objetivo, según apuntó ayer el edil responsable, José Araújo, es «chegar a acordos e arranxar un bloqueo que afectaba directamente á cidade».

El concejal popular indicó que existen «diferencias» en la interpretación del pliego de condiciones que debería cumplir la compañía. Araújo dijo que se estudiará la situación antes de tomar decisiones, pero fue muy crítico con la gestión del anterior gobierno en esta materia y en otras similares. De hecho, el edil del ejecutivo del PP anunció ayer que también se han detectado problemas con la empresa que gestiona el mantenimiento de la mayor parte de los parques y jardines de la ciudad. «Non está a cumprir coa súa obriga na súa totalidade e agora mesmo os técnicos están enumerando todos os incumprimentos para poder reclamalo e detraelo da factura», apuntó Araújo, que no ahorró en calificativos para definir la situación. «Agora mesmo atopámonos cunha empresa que non fai ben o traballo», dijo el concejal, que lamentó el «abandono total» por parte de la compañía.

Para ilustrar la problemática, José Araújo explicó que entre las obligaciones de la adjudicataria estaba la de entregar mil árboles: «Iso non se fixo e logo encontrámonos con un montón de espazos nos que tiña que haber unha árbore e non a hai». La empresa está con el contrato en precario, de modo que la «máxima prioridade» es trabajar para licitar «con urxencia» el servicio de nuevo. Y, mientras, dice el concejal, «coller as facturas que está pasando a empresa mensualmente e, desas facturas, descontar todos os traballos que non se fan e estudar descontar do aval que ten o Concello todo aquilo que quedou en cumprir e que non cumpriu».

El Ayuntamiento tiene, además, dificultades para compensar esas carencias con sus propios empleados, otro motivo de crítica de Araújo hacia sus predecesores: «Se retirou persoal de áreas moi importantes, como parques e xardíns, e así as brigadas se foron dalgunha forma desgastando e todo iso tamén nos afecta no día a día e estámonos organizando para ser capaces de chegar a todas as demandas».