La policía investiga si las armas se usaron en otros delitos

La Voz

OURENSE CIUDAD

Tanto la pistola como la escopeta estaban en perfecto estado de conservación y tenían los números de serie borrados

22 abr 2015 . Actualizado a las 13:04 h.

Los dos detenidos por el frustrado atraco del lunes a un vecino del lugar de Canivelos, ante quien se presentaron encapuchados y armados con una escopeta y una pistola lista para ser disparada, permanecían anoche en los calabozos de la comisaría. El más veterano, Juan Carlos B. A., que cuenta con varias detenciones en su haber, se negó a declarar a la policía. Y cambió de abogado a las pocas horas, para renunciar al de oficio y designar a uno particular. Por su parte, John Stiven G. C., un chico de 19 años de origen colombiano, trasladó a su compañero toda la responsabilidad de la actuación, tanto de los preparativos como de la elección de las armas.

La policía, al margen del distinto grado de colaboración que han mostrado los dos detenidos, trata no solo de aclarar la posible implicación de estas dos personas en otros delitos, sino que las armas fueran utilizados en algún otro hecho delictivo. Tanto la pistola como la escopeta estaban en perfecto estado de conservación y tenían los números de serie borrados.

Los detalles del frustrado atraco, con cuerdas, pasamontañas y armas, hacen sospechar a las fuerzas de seguridad que al menos uno de los autores haya participado en otros hechos delictivos, sin descartar la posibilidad de que se hayan desarrollado fuera de Ourense. Sorprende, no obstante, el atrevimiento -o desesperación, dicen en medios policiales- mostrado por los autores de este intento de robo, frustrado por el oposición de la víctima y el hecho de que dos testigos alertasen a la policía, al haber actuar a plena luz del día con riesgo de ser descubiertos.