La corporación más convulsa de la historia política de Ourense

Miguel Ascón Belver
miguel ascón OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

El 37 % de los concejales de la capital elegidos en el 2011 han abandonado su cargo

27 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

No hay precedentes equiparables. El mandato 2007-2011 ha sido el más convulso de la historia de la democracia en el Concello de Ourense. Esta semana se ha producido la, hasta ahora, última dimisión y ya es la undécima. La renuncia de Susana Gómez Valencia se hará efectiva en el próximo pleno y, de ese modo, la crisis política del Ayuntamiento se extiende también a Democracia Ourensana, que era el único grupo en el que no se habían producido bajas.

El BNG es la formación que más concejales ha perdido en estos cuatro años. Los tres ediles que tiene actualmente el frente entraron en la corporación por dimisiones. Fernando Varela se fue por su imputación en la operación Pokémon y, al poco tiempo, también sus compañeras Isabel Pérez y Marta Arribas, en su caso debido a una decisión personal vinculada a la crisis originada en el bipartito. El Bloque empezó de cero con tres nuevos concejales, pero su portavoz, Xosé Somoza, también tuvo que dimitir al ser imputado en otra investigación judicial.

Los problemas con la Justicia son, de hecho, el principal motivo de los concejales ourensanos para dejar el cargo. Así les ocurrió a los socialistas Francisco Rodríguez (exalcalde implicado también en la Pokémon) y Áurea Soto, que irá a juicio por la legalización de la plaza de San Antonio. Sin embargo, el otro dimisionario del PSOE, José Carlos Martínez-Pedrayo, se fue por una decisión exclusivamente personal.

También esa fue la razón del adiós de José Luis Baltar en el PP, que dejó la política en el 2012, antes de su inhabilitación por sus supuestos enchufes (pendiente de recurso). Odilo Masid fue sustituido debido a su fallecimiento y Guillermo Collarte, en teoría para centrarse en el Congreso, pero también por sus diferencias con la dirección del partido.