Roba un turismo, lo utiliza para cometer varios robos y a continuación lo quema 

La Voz OURENSE

O IRIXO

El fiscal valoró la drogadicción del imputado para dejar en dos años y tres meses las condenas por los delitos que le atribuía

18 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Con la misma rapidez con la que Josué J. D. cometió varios robos y se apropió de dos coches, para facilitar su desplazamiento a finales de julio del pasado año, confesó ayer su responsabilidad y aceptó la condena que le propuso el representante del ministerio fiscal. Había sido detenido el día 30 de julio y desde entonces permanece en prisión. Ayer fue trasladado al palacio de justicia, admitió su proceder y regresó a prisión con una condena más sobre sus espaldas, consistente en un año de prisión por un delito continuado de robo con fuerza en las cosas; seis meses de prisión por otro delito contra la seguridad vial, al haber conducido al menos dos turismos sin tener ni haber obtenido nunca permiso administrativo para esa actividad, con nueve meses más de prisión por otro delito continuado de robo de uso correspondientes a los vehículos. Uno de ellos lo quemó tras uno de sus robos.

La sucesión de hechos por los que ayer llegó a juicio arranca en la madrugada del día 19 de julio del 2014. Forzó el acusado la puerta del bar Euro, en la calle Otero Pedrayo de O Carballiño. Se apoderó de 396 euros de la caja registradora, varios objetos y mercancía cuyo valor total ronda los 3.300 euros.

La siguiente cita fue el día 27 del mismo mes a las nueve de la mañana. Robó un Renault Clío que estaba estacionado en O Carballiño. Sin carné, huyó con el coche y lo mantuvo en su poder hasta que en la madrugada siguiente lo estrelló contra la puerta de entrada a la pulpería O Carballiño. Cogió la máquina tragaperras, valorada en 4.356 euros, y también se apropió de los 1.490 euros de recaudación.

Horas después, sin haber cambiado de coche, se desplazó hasta el bar A Estación de O Irixo. Palanqueó la puerta de una bodega anexa a la instalación principal y se apropió de 1.600 euros en efectivo, mil de ellos después de haber forzado una tragaperras. En Pousada, instantes después, quemó el coche que había sido mudo testigo de sus andanzas y robó otro, un Opel Corsa, estacionado en O Carballiño. Con él se desplazó hasta ser localizado y detenido por la Guardia Civil, entonces ya alertada sobre la oleada de robos que este joven de 27 años había cometido. Ahí se acabó la carrera de Josué. Está en prisión desde entonces. Y seguirá una temporada. El fiscal valoró ayer que en la época en que ocurrieron los hechos fuese toxicómano, por lo cual rebajó la petición de condena, pero, a pesar de ello, aún le queda algún tiempo que cumplir.

Los daños y perjuicios ocasionados por estas acciones delictivas han dado lugar a una primera tasación de algo más de 10.000 euros, sin contar los desperfectos en la pulpería y los destrozos en el segundo turismo. La condena incluye la responsabilidad civil, aunque no parece previsible que el acusado vaya a hacer frente a ese pago.