El alcalde dice que el PSOE debe aclarar su postura en relación a las negociaciones con los dueños de la vieja ferretería Soto
30 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La operación de compra del edificio de la antigua ferretería Soto condicionará las primeras decisiones del futuro gobierno local de O Carballiño. El PSOE ha reiterado que impugnará el pleno en el que se adoptó dicho acuerdo y desde el BNG y Alternativa Veciñal do Carballiño se hizo de esta medida uno de los ejes de su campaña electoral. El alcalde en funciones, Argimiro Marnotes, se ha posicionado al respecto recordando que anular el último pleno municipal tendrá consecuencias mucho más allá de paralizar la compra del inmueble de la antigua ferretería Soto. Marnotes ha emplazado al PSOE a qué defina su postura: «Xa que por un lado falan de negociar cos propietarios e por outro de impugnar o pleno no que se iniciaba o expediente para negociar cos propietarios». Este decisión, precisa el regidor en funciones, coincide con lo que defienden los socialistas.
Mucho más que la casa Soto
Marnotes recordó que la impugnación del pleno lleva consigo hacer lo propio con acuerdos como el aumento de horas en el servicio de ayuda a domicilio, la concesión de subvenciones directas a colectivos y la urbanización de varias calles.