Una fuerte tormenta de agua y granizo colapsó O Barco de Valdeorras durante dos horas

La Voz OURENSE / LA VOZ

O BARCO DE VALDEORRAS

Cedida

Las principales entradas quedaron bloqueadas y la N-120 permaneció cortada toda la noche por seguridad ya que se levantó el asfalto

10 may 2017 . Actualizado a las 13:23 h.

O Barco de Valdeorras quedó colapsado por una fuerte tormenta que descargó gran cantidad de agua y granizo durante unas dos horas. Las principales entradas de la capitalidad valdeorresa quedaron bloqueadas y algunos vehículos quedaron atrapados sin poderse mover entre las corrientes de agua, aunque no hubo daños personales. La alerta por tormentas estaba anunciada, pero aún así la descarga de agua fue tal en O Barco que causó problemas en el tráfico y en bajos y garajes, que resultaron anegados. El arroyo Mariñán llenó su cauce, aunque con el paso del tiempo, sobre las diez de la noche, ha comenzado a bajar el caudal.

Los servicios de emergencias, bomberos, GES, Policía Local y Guardia Civil se tuvieron que dividir y organizar para atender las prioridades. Las entradas por la carretera de Ponferrada, en la avenida del Bierzo, el acceso por A Pobra o el puente de Veigamuíños, un punto que sufre recurrentes problemas de este tipo cuando llueve, quedaron cortadas por la lluvia. La N-120 ha quedado cortada y así permaneció durante la noche debido a que la tromba provocó el levantamiento de algún tubo y del asfalto y los responsables de mantenimiento del vial decidieron cortarla por seguridad hasta examinar cómo está el suelo, explicó el alcalde, Alfredo García. Además del agua, la tormenta descargó una cantidad importante de granizo que se teme que haya dañado las viñas y otros cultivos. Los problemas principales se dieron en O Barco, pero también hubo escorrentías en Vilamartín de Valdeorras.

Empezó a llover con fuerza a las 19.30 horas y la tormenta se prolongó hasta las 21.30 horas. A partir de las 22.15 horas, el alcalde de O Barco daba por controlada la situación, aunque los servicios de emergencia seguían bombeando y retirando agua de donde estaba causando más problemas. La Policía Local permanecerá alerta toda la noche. Los servicios de emergencias se han reforzado así como el voluntariado de Protección Civil. La tormenta puso a prueba los colectores y sumideros de la villa, que se llenaron. El regidor espera que no haya daños importantes en bienes públicos. El agua entró en el pabellón viejo y hubo que suspender clases.