El proceso se ha puesto en marcha después de meses parados tras un cambio en la normativa
19 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de O Barco ha iniciado los expedientes para declarar la situación de abandono de diez coches, aparcados en la calle y que llevan meses sin que nadie los mueva. Sin dueño conocido que se encargue de ellos, los vehículos acumulan polvo y, en ocasiones, sufren actos de vandalismo (y a veces ya estaban en mal estado de conservación). Son un desecho que hay propietarios que deciden abandonar de esta manera, y es el Concello el que se encarga de sacarlos de la calle. Los aparcamientos públicos que hay en el casco urbano -con especial incidencia en el que está enfrente del hospital comarcal- y las calles menos céntricas -como Penas Forcadas o Xagoaza- son los lugares donde se ubican los vehículos abandonados.
Los expedientes son tramitados por la Policía Local, que es también la encargada de detectar la existencia de vehículos abandonados en la calle. Una vez que se conoce esta situación, colocan una pegatina sobre el coche para saber si la situación de abandono se mantiene, y después se inicia el expediente que rematará con la retirada del coche y su traslado a un desguace. O, también ocurre a veces, con que el dueño se hace cargo de su propiedad y acaba llevándolo por sus propios medios a un desguace, o deshaciéndose de él.
Largo proceso burocrático
Son meses de trámites que con la nueva normativa todavía se dilatarán más. «Hubo que cambiar los modelos que se seguían para ser más garantistas», explica el alcalde, Alfredo García, de cara a evitar posibles reclamaciones de propietarios. En este sentido, no obstante, García aseguraba que tal situación no se había producido nunca hasta el momento.
En el caso de que no se consiga contactar con el propietario, las notificaciones deben hacerse a través del Boletín Oficial de la Provincia. Una vez cerrado el proceso, el vehículo pasa a ser considerado residuo sólido urbano, y es entonces cuando el Concello puede finalmente actuar. Se lleva a un centro de descontaminación, donde se separan los aceites y combustibles de otros elementos para poder después desguazar el vehículo.