Una semana de controles, con sus correspondientes resultados, deja una foto bien nítida de la provincia.
-Hemos notado un descenso generalizado de personas que conducen vehículos a motor con tasas de alcohol superior a los permitidas. Sin embargo, dado que persiste la presencia de alcohol como causa inmediata en la producción de accidente, se han redoblado los esfuerzos operativos en los dispositivos de control, llegando a permanecer hasta cuatro horas en el mismo punto.
-Lo que está fuera de duda es que cada vez hay menos denuncias por alcoholemia...
-Gracias a la labor de los agentes de la Guardia Civil de Tráfico de Ourense se ha logrado llevar a la conciencia colectiva de los conductores de la provincia que en cualquier momento, lugar, hora o día, puede estar una patrulla hacer un control.
-¿Colaboran los conductores en los controles?
-En general, sí. Los incidentes no pasan de casos aislados.
-Hace un año que alertaba, en compañía del jefe provincial de Tráfico, David Llorente, sobre la gravedad del consumo de drogas.
-Coincidimos plenamente. La sintonía con el jefe de Tráfico es absoluta. Tenemos un problema social muy serio. Los resultados de estas pruebas dicen que las drogas, los estupefacientes, están muy presentes en la sociedad. Conducir bajo los efectos de esas sustancias multiplica el riesgo de un accidente.
-¿Cree que algunas personas consumen drogas, en vez del alcohol, creyendo que es más difícil que se les detecte?
-Es posible que haya sido así. Lo que no se puede negar es que hasta hace unos años, salvo casos excepcionales, el consumo de drogas al volante quedaba prácticamente impune. No se hacían pruebas, porque tampoco había medios materiales. Ahora, sin embargo, cuando ya tenemos equipos específicos para detectar drogas, tanto en Ourense como en Verín y O Barco, el panorama es diferente. De hecho, cada día vemos más casos y hay más denuncias.
-Y no solo en fin de semana...
-Así es. Es verdad que, igual que ocurre con el consumo de alcohol en ciertas fechas, el de sustancias estupefacientes se asociaba al fin de semana. Los controles, sin embargo, nos están poniendo ante una realidad diferentes, que muestra consumo de drogas, sobre todo hachís y cocaína, en cualquier momento.