En verano nos vamos a la granja

COLES

CEDIDA

En familia, con amigos o solos: la desconexión va de la pata de las alpacas

28 ago 2018 . Actualizado a las 15:16 h.

Son el gallo del corral. Ni las cabras, las gallinas, los perros y las yeguas consiguen eclipsarlas. Las doce alpacas de la granja que Beatriz Iglesias tiene en Vilarchao, Coles (Ourense), son sus compañeras de trabajo. Juntas producen la fibra con la que ella después hila las piezas de lana que vende. Desde hace un mes, los humanos interesados en conocer a este mamífero doméstico de la familia de los camélidos -emblema del escudo de Bolivia hasta que lo sustituyeron las llamas- pueden convertirse en sus cuidadores por un día. Así es el primer taller artesanal con alpacas de Galicia.

«Veñen familias cos nenos, pero tamén grupos de amigos xa adultos que queren desconectar, e fano coa vida na granxa», explica Beatriz. Las jornadas de convivencia han despegado con éxito en Alpacas As Bolboretas. La actividad se celebra los domingos por la mañana. No han parado desde que empezaron este verano. «Creo que aínda lles impresionan máis aos maiores. Moitos é a primeira vez que as ven e que as teñen tan cerca», continúa. La última sesión estuvo protagonizada en exclusiva por adultos. «Hai dous tipos de obradoiros, en función da idade dos asistentes. Uns para nenos e outros para pais. Ninguén pode saír frustrado de aquí», destaca Iglesias.

No le gustan a Iglesias las explotaciones ganaderas intensivas donde los animales no ven la luz del día. Su objetivo es que la gente se relaje dejando atrás el ruido y el ajetreo. ¿Cómo? En contacto con unas productoras «cariñosas, que se achegan a ti e interactúan», al mismo tiempo que se empapan de su filosofía empresarial. «Quero dalas a coñecer, pero tamén proporcionarlle visibilidade ao traballo dos artesáns. En que consiste o enfiado, por que custa o que custa esta la. Son pezas únicas, non fabricamos en serie».

Autóctonas de Sudamérica, además de por su docilidad, las alpacas destacan por la calidad de la fibra de sus lanas. «É de luxo e son uns animais que poden vivir perfectamente comigo aquí no rural», dice la responsable de Alpacas As Bolboretas. «O nome da empresa -hace un inciso- é porque cando comecei todo eran problemas. Eran as eirugas feas que ninguén quería». Lo que viene después no hay que explicarlo. Con verlas es suficiente.

«Aprenden a coidar un animal diferente, a ter paciencia con elas, a respectar o contorno natural. Tamén asisten a unha demostración do que é o proceso da la. Logo, fan as súas propias pezas nun obradoiro guiado. Gústame dicir que é unha educación divertida», termina Beatriz. En esta granja todo se hace pata con pata.

Un día cuidando alpacas en el campo

Dónde

En Vilarchao, concello de Coles.

Público

Son grupos abiertos, con un tope de 12 personas por grupo.

Cuándo

Domingos por la mañana. Mejor reservar.

Precio

Adultos, 20 euros; niños de 4 a 14 años, 6 euros; gratis para los menores de 4 años.

 

A CASA DO QUEIXO

En Sobrado dos Monxes. Los pequeños pueden poner a prueba sus capacidades culinarias sin tener que visitar un plató como el de MasterChef Junior. Talleres para todos los públicos donde aprender a elaborar quesos.

 

GRANXA DE BARREIROS

Este centro de Sarria suma 60 años dedicado a la educación medioambiental. Las visitas a la granja con talleres artesanales requieren reserva previa en verano. Están abiertos a público de todas las edades.

 

GRANJA ESCUELA BERGANDO

Está en Negreira, a 15 minutos de Santiago. Además de los campamentos de verano y las clases de hípica, también recibe visitas. Las hay de medio día, de un día completo o de varios. Aprenden en la granja y el huerto.

 

GRANXA DO SOUTO

Está en Mera de Abaixo, Ortigueira. Es una de las muchas granjas abiertas en Galicia para las visitas familiares. Se pueden realizar los fines de semana. Los grupos conocen las instalaciones e interactúan con los animales.