«Mi trabajo era ayudar al agricultor»

Noelia salgado OURENSE

CELANOVA

Álvaro Vaquero

Ricardo Mínguez recoge en un libro parte de la historia de la agricultura y la ganadería de la comarca de Celanova

21 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Ricardo Mínguez Abajo fue jefe de la oficina Agraria de Celanova entre los años 1972 y 2012. Autor de estudios de divulgación de la riqueza micológica de la comarca y de Galicia, ahora ha decidido sacar a la luz un nuevo libro sobre la historia de sus casi cincuenta años de trabajo.

-Para las personas que no conocen este servicio, ¿cómo explicaría que es la « La Agraria»?

-Mi trabajo consistía en transmitir conocimientos del sector agrario a los vecinos de la comarca de Celanova, es decir, era una labor de atención e información para que aprovecharan mejor los recursos del campo. En definitiva, mi trabajo era ayudar al agricultor y al ganadero. En aquel momento llevaba once concellos de la comarca.

-Este libro, ¿tiene algo que ver con los anteriores?

-No, los otros son colaboraciones con mi hijo Alejandro sobre la parte de la botánica que estudia los hongos, la micología, un tema muy desconocido. En este quise mostrar las orientaciones agrarias que había en el momento. El libro está divido en tres partes: una de recogida de datos, una de divulgación con una gran documentación gráfica del momento y otra parte de anécdotas. La temática de las setas también la trato, pero como una información orientativa más.

-¿Qué diferencia ve entre la oficina agraria comarcal del momento con respecto a la de antaño?

-Aunque llevo ya unos años retirado he podido conocer las dos vertientes. Nosotros nos dedicábamos a dar información, divulgar y asesorar al agricultor. Trabajábamos con ellos a pie de campo. Por ejemplo, les informábamos de la plantación de maíz híbrido, desconocido por aquella entonces. Ahora el servicio se dedica más a la tramitación de ayudas, subvenciones e información de las políticas europeas.

-¿Cuando informaba sobre nuevas formas de cultivo, los agricultores eran reticentes a incluir novedades en su forma de trabajo?

-A la primera de cambio sí, era un servicio desconocido y cuando llegábamos tenían una desconfianza. Entonces le proponíamos demostraciones de método. Usted tiene este campo en el que planta patatas, pues déjeme una parte y siembre de la nueva forma que le propongo. De esta manera ,comprobaba sobre el propio terreno que nuestras sugerencias eran efectivas.

-¿Qué otras dificultades se encontraba en el oficio?

-Por ejemplo, los caminos de acceso a fincas, a veces, eran dificultosos. Para ello poníamos en marcha obras comunitarias; ellos ponían la mano de obras y nosotros tramitábamos ayudas. Aunque fuera para ocho, diez vecinos, para ellos era una gran mejora.

-Cuénteme alguna anécdota.

-Pues conocí lo que era «postear las casas». Llegué a una aldea en la que había quedado para reformar unas cuadras y me dijeron que el dueño no estaba porque fuera a ayudar en un entierro. El hombre no llegaba y no llegaba y resulta que estaban poniendo unos postes en la casa del difunto para apuntalar la habitación por abajo y no se viniera abajo la vivienda con la visitas de las personas a dar el duelo. Era muy común postear el hogar y yo no lo sabía.

-¿Cómo ve la agricultura de la comarca en la actualidad?

-Está muy abandonada. Ahora mismo es más para consumo propio o casi como una afición de muchos jubilados. Hace 30 años la explotación de vacuno producía casi un 25% de toda la leche de la provincia de Ourense. Había también cuatro fábricas transformadoras de este líquido en queso. Esto prácticamente ha desaparecido. Es muy difícil recuperar la industria ganadera y agraria que teníamos. Esta profesión debería estar dignificada y en cambio lo vemos como un trabajo muy esclavo y sin beneficios. Creo que la huerta como terreno más pequeño sí se podría recuperar.

-El parte de divulgación del libro, ¿las fotos se pueden considerar una documentación histórica?

-Sí, están datadas y recogen gráficamente cómo se hacía la labor en aquellos tiempos. Han sido sacadas por mí y otros compañeros. Es un libro de gran valor documental sobre toda la historia que he vivido en este servicio.