Hay futuro

Chiqui Gutiérrez A PIE DE CUNETA

BARBADÁS

11 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Camisetas fosforito con la IS, la carpa de Miúdo rodeada de gente, los Porsche corriendo como una exhalación por los tramos, dos pilotos de casa llevados en volandas por la afición. En las emisoras que seguían la prueba no dejaban de sonar los dos nombres: Iago Silva y Miguel Paredes «Miúdo».

Y es que las bodas de oro del Rali de Ourense nos han traído un enorme regalo, de nuevo pilotos locales en las plazas de cabeza y de nuevo pilotos locales llevando el nombre de Ourense bien arriba con sus escuderías Barbadás y Viduedo. Lo que tanto esperaba esta afición. Otra vez nuestros deportistas pisan fuerte y comienzan a forjar un futuro más que esperanzador, después de muchos años de sequía y de que pilotos foráneos se llevasen los dineros, el cariño y el aprecio de la considerada capital gallega del Automovilismo.

Fue un dato más que importante en un 50 Rali de Ourense que ya es historia, y que en letras de oro dejó grabados los nombres de Cristian García y Rebeca Liso con el Ford Fiesta R5, en plata los de Iván Ares y José Antonio Pintor y su Hyundai i20 R5 y en bronce los de Pedro y Marcos Burgo y el Skoda Fabia R5, dejando claro que a pesar de los cambios de normativa, el campeonato no difiere mucho de lo que contaba la pasada temporada.

Un buen coche en manos de un gran piloto como lo es Cristian García, otro gran piloto como Iván Ares con un efectivo Hyundai al que le saca toda su quintaesencia y los Burgo con un excelente coche como el Skoda, de menos a más, con las miras puestas en estar muy pronto peleando por vencer las pruebas. Y todo ante una prueba larga, dura, comprometida y engañosa (que se lo digan a Cohete Suárez), en lo referente a como cambian los tramos de una pasada a la otra. Y como se complica el asunto cuando hay que correr de lo lindo para vencer en tu categoría. El Rali de Ourense demostró, una vez más y van cincuenta, que llevarse para casa la deseada rueda de afilar de oro no es tan fácil como puede parecer. Y por eso, por seguir manteniéndose en la élite de los ralis españoles y por contar de nuevo con pilotos de casa capaces de, muy pronto, disputar la victoria, hay futuro. Y mucho, con el propio rali y el automovilismo de esta provincia.