Ourense vive el verano menos lluvioso del último lustro

Fina Ulloa
Fina Ulloa OURENSE / LA VOZ

BAÑOS DE MOLGAS

antía otero

Desde el pasado 20 de junio la ciudad solo registró precipitaciones en una jornada

04 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Si las previsiones se cumplen hoy será el segundo día en lo que va de verano en el que los vecinos de la capital verán algo de lluvia. No mucha, porque aunque se prevé que puede haber precipitaciones en cualquier lugar de la geografía ourensana esta tarde, lo cierto es que no se espera que sean abundantes. La última vez que las estaciones meteorológicas ubicadas en el término del Concello de Ourense registraron agua fue el 12 de julio y lo que cayó ni siquiera llegó al nivel de 0,1 litros por metro cuadrado, según los datos oficiales de registros de Meteogalicia. Desde que comenzó el verano aquella fue la única jornada de precipitaciones -si se le puede llamar así- desde el comienzo oficial de la estación. Precisamente aquel día, el 20 de junio, sí llovió en la ciudad. Se recogieron 11,6 litros por metro cuadrado.

Con esas cifras, este del 2016 está siendo el verano más seco del último lustro. El pasado año, desde el comienzo oficial de la estación a estas alturas, ya se contabilizaban 10 días con lluvia, aunque en conjunto no dieron para mucho porque se recogieron en total 23 litros. En el 2014 los amantes del paraguas se lo pasaron mejor, pero quienes disfrutaban de las vacaciones en la ciudad no estaban nada contentos. Hubo 18 días de lluvia y en total cayeron 90,6 litros. Ese fue el más húmedo del quinquenio porque, aunque en el 2013 llovió en once jornadas durante ese ese mismo período la cantidad se quedó en 61,6 litros; y en el año 2012 los 19 días en los que hubo algo de agua el registro total sumó 72,6.

La provincia, más afortunada

La predicción de que este sería un verano muy seco no solo se confirma en la capital sino también en el resto de la provincia, donde los datos de precipitaciones recogidas son en general más bajos que los de los veranos precedentes. Hay cincos municipios en los que los valores publiométricos registrados por Meteogalicia reflejan que no tuvieron un solo día de lluvia durante el pasado mes de julio: Baños de Molgas, Muíños, Maceda, Laza y O Barco. Al margen de estos casos, la provincia en su conjunto ha tenido mejor suerte que la ciudad en cuanto a lluvia registrada durante el último mes. En Carballeda de Valdeorras, la estación de Casaio sumó 26,5 litros en dos jornadas con precipitaciones y la de Lardeira 18,8 en un solo día.

Rubiá acaparó 17.4 litros en el medidor ubicado en As Petarelas el 6 de julio, Baltar y Larouco empataron a 13 litros por metro cuadrado, pero mientras el primer municipio necesitó cinco días para alcanzar esa suma -fue por cierto el concello con más jornadas de agua-, el segundo lo logró solo en uno.

Los concellos de Vilamartín, Viana, Leiro, Castrelo, Xinzo, Castro Caldelas o Vilardevós también tuvieron suerte y superaron el litro por metros cuadrado, mientras que el resto se quedó por debajo.

El más seco, no el más caluroso

Aunque este 2016 esté dejando menos precipitaciones que los anteriores y algún que otro pico de temperaturas por encima de los cuarenta grados, este no es el verano más caluroso de los recientes. La temperatura media del mes de julio fue de 23,6 grados, cifra superada en 2013, que dejó un promedio de 24,37. También aquél año tuvimos ola de calor y la máxima registrada fue de 41,93 grados. Pero además las mínimas también fueron más altas que este verano. Ninguna noche se bajó de los 11 grados, mientras que este año hubo mínimas de 10 y hasta de 9 grados.

Cuatro vigilantes controlan las pozas pero la playa de la Antena sigue sin socorrista

A falta de agua caída del cielo, los ourensanos buscan aliviar el calor con lluvias en piscinas, zonas de pozas termales y en el propio río Miño. Un baño que en uno de sus puntos de referencia para el chapuzón veraniego, la playa de la Antena, sigue sin vigilancia. El Concello de Ourense aún no ha resuelto la contratación de un socorrista para esa zona fluvial, aunque según aseguraban ayer «será inminente». La falta de profesionales con la titulación oficial, que aqueja a muchos otros arenales gallegos en esta campaña, también ha dificultado encontrar antes una solución en Ourense. Los vecinos que quieran utilizar este espacio de ocio deben hacerlo bajo su exclusiva responsabilidad entre tanto y tomar todas las precauciones necesarias para evitar accidentes.

Lo que sí se han cubierto son cuatro plazas de vigilantes en las termas de O Muíño da Veiga y A Chavasqueira. Están operativos desde el lunes y su contratación se ha realizado en base a una línea de ayudas de la Xunta para personas de las listas de formación ocupacional. Sin embargo, desde el gobierno local advierten que, aunque están en posesión del título de primeros auxilios y sepan actuar ante situaciones que precisen de esos primeros cuidados, no son socorristas. Esto implica que no están preparados para rescatar a alguien dentro del agua del río, ni esta tarea entra en sus funciones. También hay que tener en cuenta que la regulación de estos contratos implica que no pueden realizar más de 25 horas semanales, que consumen desde las 12.00 a las 20.00 horas de lunes a viernes.