«Carne y vino al segador...»

ALLARIZ

MIGUEL VILLAR

Los vecinos de Queiroás homenajean el antiguo oficio de jornalero

19 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Armados con una hoz, dediles y un sombrero de paja, los vecinos y allegados de Queiroás da Igrexa, Allariz, se levantaron ayer con el sol para homenajear el antiguo oficio de segador. Fueron muchos los abuelos y padres que formaron parte de las cuadrillas que abandonaban los lares gallegos en verano para ganarse un jornal en Castilla. Allí trabajaban de sol a sol. Siendo esta la manecilla que dictaba su horario. No había descansos para ir comer. Eran las mujeres las encargadas de preparar torrijas y platos sencillos que alimentasen a los hombres y llevárselos a los campos. Para muchos de ellos las estrellas eran sus compañeras nocturnas, puesto que un techo bajo el que dormir era privilegio de pocos. Y así, durante un mes o dos, hasta que todo el trigo y centeno fuese recogido. Era un oficio duro, pero necesario, que espantaba el hambre de muchas casas por un tiempo. Esos y otros recuerdos revivieron ayer en la pequeña localidad de Queiroás. Francisco Rodríguez todavía recuerda con nostalgia la primera vez que fue a Castilla con su padre y abuelo y las primeras mil pesetas ganadas, «un dinero para la época», afirmaba mientras sostenía la hoz.

Hoy en día, los avances tecnológicos han facilitado esta tarea y sustituyen a esas cuadrillas. El centeno y trigo son recogidos por una segadora. Sin embargo, y a pesar de los años transcurridos, los vecinos de Queiroás no olvidan a estos viejos héroes trabajadores de la tierra, que sacrificaron su juventud por unas pocas pesetas. «O abandono do campo levou a que a vivencia do medio rural se perdese. Nós queremos manter viva esta tradición», afirmaba Paco García, alcalde de Allariz. Una vez acabada la escenificación de la siega, los vecinos se reunieron bajo la sombra compartiendo buena comida, vino y recuerdos. De fondo, el sonido de  las gaitas y canciones tradicionales.

Esta es una de las celebraciones incluidas dentro del ciclo del pan de las fiestas etnográficas de Allariz. En agosto, tendrá lugar la «malla y moenda» de los granos, y más tarde «la fornada».